Escuela revolucionaria de París: ¡Un éxito sin precedentes!
Parti Communiste Révolutionnaire
Los días 22 y 23 de noviembre, más de 110 personas se reunieron en París para debatir las cuestiones más urgentes de la situación actual, con motivo de la Escuela Revolucionaria de París. Esta escuela se extendió mucho más allá de la región parisina, ya que también estuvieron presentes una veintena de compañeros de Caen, Bourges, Nantes y Estrasburgo, así como un compañero de nuestra sección estadounidense, los Comunistas Revolucionarios de América.
Organizado por la sección parisina del Partido Comunista Revolucionario (PCR), este fin de semana de formación se celebró en medio de numerosas convulsiones mundiales de los últimos meses: crecientes tensiones entre imperialismos rivales así como crisis políticas y movilizaciones revolucionarias en varios países. Como muchos compañeros señalaron durante el fin de semana, solo el marxismo puede proporcionar la base teórica para orientarse en el tumulto de estos acontecimientos. ¡Esta escuela se celebró en el momento oportuno!
Nuestro compañero Gabriel Vergne inició la actividad con una contundente presentación sobre las perspectivas para Francia. Repasó la profunda crisis de régimen que atraviesa el país, especialmente desde las elecciones legislativas anticipadas de julio de 2024. Ante la inestabilidad política, la burguesía francesa se debate entre la necesidad de intensificar las medidas de austeridad contra la clase obrera y la juventud, y el temor de provocar un movimiento social a gran escala. El movimiento “Bloqueemos todo” , saboteado por las direcciones reformistas del movimiento obrero, fue solo un anticipo de las luchas colosales que se avecinan. Por lo tanto, fue una discusión esencial para capacitar a los activistas y ayudarles a comprender y explicar la situación actual.

A continuación, Jules Legendre expuso la historia del imperialismo francés en África y cómo el dominio colonial del continente se transformó, durante el siglo XX, en una dominación económica y política más indirecta, pero igualmente brutal. Hoy en día, nuevas potencias imperialistas compiten con el imperialismo francés, que ha sido expulsado de varios países, como Burkina Faso, Níger o Malí. Sin embargo, el imperialismo francés sigue explotando y oprimiendo países enteros, mientras somete a la clase obrera francesa a una avalancha de austeridad. Por lo tanto, la lucha por derrocarlo debe ser una lucha común de la clase obrera a ambas orillas del Mediterráneo.
El final del primer día se dedicó a una discusión sobre el fascismo, presentada por Pietro S. Mientras la Agrupación Nacional (Rassemblement National – RN) está al borde del poder, muchos jóvenes están preocupados por el éxito de este partido y cuestionan su verdadera naturaleza. Pietro demostró que el RN, si bien se trata de un partido burgués reaccionario, no es un partido fascista y que el establecimiento de un régimen fascista no está en la agenda en Francia a corto plazo, debido al enorme peso social de la clase obrera y a la dinámica actual de la lucha de clases. Dicho esto, la intimidación y los ataques llevados a cabo por pequeños grupos fascistas ya son una amenaza a la que el movimiento obrero debe responder.
El segundo día comenzó con un debate titulado “Defensa del marxismo”, introducido por Jérôme Métellus. El objetivo era responder a los numerosos intentos de “revisar” el marxismo, especialmente en el mundo académico. Jérôme volvió a los elementos fundamentales de las tres partes constitutivas del marxismo: el materialismo dialéctico, el materialismo histórico y la teoría económica de Marx. En la discusión, diferentes camaradas intervinieron para demostrar la vitalidad de estas ideas, ilustrando con diferentes ejemplos como siguen vigentes hoy en día.

La sesión final de la escuela se centró en el tema “Clase, partido y dirección”. Guillaume Eudeline subrayó la urgencia de construir un partido revolucionario, firmemente arraigado en la clase obrera y armado con las ideas revolucionarias del marxismo. Esta fue la clave de la victoria de las masas rusas, en 1917, que contaban con dicho partido: el Partido Bolchevique de Lenin y Trotsky. Solo una gran firmeza en los principios, y una igual flexibilidad en la táctica, pueden prevenir las trampas gemelas del oportunismo y el izquierdismo. Varios camaradas ilustraron las dramáticas consecuencias de la ausencia de un partido suficientemente preparado para intervenir en una situación revolucionaria: en mayo del 1968 en Francia, en Alemania entre 1918 y 1923, y en España durante la guerra civil en los años 30.
En su conclusión, Guillaume hizo una pregunta a todos los asistentes: “¿Quién quiere participar activamente en el derrocamiento del capitalismo? ¡Todas las manos en la sala se levantaron inmediatamente! 8 personas se han unido al PCR a raíz de la escuela, y alrededor de otros diez participantes están invitados a participar en las próximas reuniones de nuestras células.
Como muestra del entusiasmo despertado por esta escuela, las ventas de material político producido por el PCR y nuestra editorial internacional Wellred Books, registraron un récord: ¡Casi 800 € de ventas, incluyendo más de 500 € de libros!
Sin duda esta escuela revolucionaria fue la más exitosa jamás organizada en París. ¡Todos los camaradas salieron con energía y dispuestos a redoblar sus esfuerzos para seguir construyendo la Internacional Comunista Revolucionaria en Francia!

