La Comuna de París fue un periodo revolucionario de 2 meses en el que se llegó a una organización cercana al de un sistema socialista. Duró del 18 al 28 de mayo de 1871.
La situación en Francia ante la Comuna
El 4 de septiembre de 1870, el Emperador Napoleón III pierde una batalla contra Prusia. Esta derrota lleva a disturbios en París. Incluso los Republicanos tienen mucho miedo de la agitación, están obligados a proclamar el fin del imperio y el inicio de la Tercera República. Pero la guerra no está terminada y durante el invierno de 1870-1871 París está sitiado. Muy pronto, en enero, el gobierno provisional organiza elecciones legislativas con el objetivo de firmar la paz.
El 8 de febrero, la nueva asamblea fue electa con una mayoría de monárquicos. En efecto, están a favor de la paz y los campesinos. La mayoría de los franceses no quieren continuar una guerra que les parece innecesaria. Contrariamente, los parisinos, quienes han sufrido mucho durante el sitio, votan por los republicanos que piensan que una victoria contra Prusia es posible. A la cabeza de lo que los parisinos llaman la “asamblea de los rurales” está Adolphe Thiers, un reaccionario oportunista.
Como el gobierno pensó que no era necesario defender París, 200,000 voluntarios crean la Guardia Nacional. Estos trabajadores en armas representan una amenaza para el gobierno mucho más grande que Prusia. El gobierno deja París para instalarse en Versalles.
El contexto revolucionario
Diferentes cosas han hecho que París esté en un contexto revolucionario. Primero, el sitio fue muy difícil para los parisinos que pasaron hambre terrible y desempleo. Además, la gran obra realizada de modernización de París por Napoleón III reordena a la población y une a las clases populares. También, el gobierno provoca al pueblo con medidas muy duras, por ejemplo, suprimen los subsidios de los voluntarios de la Guardia Nacional; decide que las deudas y las rentas deben ser pagadas en 48 horas; suprime la libertad de prensa, que existía desde 1868 y que permitía publicaciones anticapitalistas.
Por fin, mucha gente tiene miedo que el fin del imperio no va a durar. En efecto, hubo 2 revoluciones en el pasado (en 1830 y en 1848) que llegaron de una manera u otra a una nueva forma de monarquía. Como la asamblea tiene 2/3 de monárquicos o bonapartistas, esta situación se puede reproducir.
Entonces, las clases medias, que ahora comparten las mismas condiciones de vida que las clases populares, se radicalizan. La Guardia Nacional decide elegir un Comité Central de Federación. El Comité Central decide que los dirigentes deben ser elegidos y pueden ser revocables.
El gatillo de la Comuna
A. Thierste temeroso de la situación que hay en París y decide requisar los más de 200 cañones que están en esta ciudad. Entonces, manda al ejército durante la noche del 17-18 de marzo para recuperar los cañones. Esta parte transcurre muy bien pero no han pensado en su transporte. Cuando todo el mundo se despierta por la mañana y ve que el gobierno está tomando sus armas, empiezan a reagruparse y protestar. Thiers da la orden de disparar a la multitud pero nadie dispara. En este momento el pueblo se alía con las tropas y masacran a los dirigentes y representantes del gobierno que están ahí.
Thiers y la mayoría de los burgueses de París huyen a Versalles. Es el inicio de un colapso local total de las instituciones burguesas.
La Comuna: el inicio de una sociedad socialista
Al inicio, el Comité Central de la Guarda Nacional está al cargo del poder pero son bastante moderados. Organizan las elecciones municipales o comunales el 26 de marzo. El día antes llaman a votar por personas cercanas al pueblo, que tienen la misma vida y los mismos problemas. Entonces sobre los 90 representantes que conforman el Consejo de la Comuna, 25 son trabajadores. La mayoría son blanquistas.
El blanquismo, de Auguste Blanqui, es un corriente socialista, revolucionaria y anarquista que cree que la revolución puede ser promovida por un pequeño grupo al que las masas van a seguir. Entonces, los blanquistas creen también que el socialismo puede ser establecido por este pequeño grupo, es decir, por una dictadura de una minoría y no de todo el proletariado. Para los marxistas, son ante todo un grupo de acción sin teoría.
La minoría de la Asamblea son internacionalistas, radicales y proudhonistas.
Durante este periodo, las masas están muy activas políticamente. Primero, la mitad de toda población de París votó en las elecciones. Muchos se reúnen para platicar en clubs como el “Club de la Revolución” de Louise Michel. Estos se reúnen para tener mejores contactos con el Consejo de la Comuna. También, muchos periódicos son creados o reaparecen, es el más conocido: Le Cri du peuple (El grito del pueblo) de Jules Vallès y Pierre Denis.
El 29 de marzo el Consejo crea una Comisión Ejecutiva con 9 comisiones: guerra, finanzas, seguridad general, enseñanza, subsistencias, justicia, trabajo e intercambio, relaciones exteriores y servicios públicos. Se acuerda que dentro del sistema de la Guardia Nacional cualquier representante puede ser revocable.
El 19 de abril, se acuerdan en un programa con el objetivo de “terminar la competencia anarquista y ruinosa entre los trabajadores para el beneficio de los capitalistas” y promover “la difusión de los ideales socialistas”. La Comuna toma medidas simbólicas como la destrucción de la colonia imperial plaza Vendome y de la casa de Thiers y la adopción de la bandera roja. Pero también hacen medidas para ayudar a los más pobres. Se decide que las rentas y deudas no tienen que ser pagadas, requisan viviendas deshabitadas para darlas a quien no tiene casa, distribuyan comidas… Las fábricas fueron abandonadas por sus dueños o fueron reapropiadas por los obreros. Los extranjeros pueden ser ciudadanos.
Los movimientos de mujeres preguntan qué medidas tomar para lograr la igualdad entre hombres y mujeres pero también, en un terreno más general, sobre cómo separar a la Iglesia del Estado, que en la práctica ya se había hecho. Las escuelas se vuelven públicas y laicas. Por fin, se prohíbe el ejército permanente y se decide que los funcionarios, incluidos profesores y jueces, deben ser elegidos y no pueden tener una paga mayor que los obreros.
Está apareciendo una sociedad socialista. Pero como no ha existido ningún movimiento tal en la historia, no hay dirección clara y organizada y París está en gran dificultad económica, es muy difícil construir está sociedad.
La derrota de la Comuna: la semana sangrienta
Durante la difícil construcción de la Comuna, Thiers se está organizando con Bismarck, canciller de Prusia, para terminar con la guerra y la Comuna. Bismarck libera a los soldados cautivos permitiendo a Thiers tener un total de 130,000 hombres en su ejército. Mientras que la Comuna tiene casi 200,000 voluntarios en la Guardia Nacional, ha subestimado al gobierno, especialmente porque no han requisado el Banco de Francia, que sigue dando dinero a Thiers. Además, los guardias nacionales no son profesionales y no están bien preparados.
Cuando tratan de atacar Versalles pierden, dando como resultado un debilitamiento y un sentimiento de derrotismo en las tropas. Como no defienden bien París, le es muy fácil al ejército de Versalles entrar. El 21 de mayo empieza la semana sangrienta durante la cual 30,000 personas son asesinadas. El día 28, la Comuna está terminada pero sigue una limpieza política y unos 20,000 más son asesinados durante el mes de junio.
Las lecciones de la Comuna
Muchos errores se cometieron durante estos dos meses, la situación era muy difícil. Además, fue un movimiento espontáneo, absolutamente desprevenido surgido como una reacción a la agresión de la burguesía. También la Comuna estuvo aislada, solo participaron la mitad de los parisinos. Los campesinos eran atrasados, reaccionarios y estaban a favor de la monarquía.
La Comuna fue un momento de experimentación de otra forma de organización de sociedad que sirvió de base esencial para la teoría marxista y las luchas futuras. Primero mostró que los blanquistas no pudieron aplicar su programa (incluso hicieron absolutamente lo contrario). Ellos que estaban en contra de los compromisos y de las etapas intermedias fueron obligados a adaptarse a las dificultades que encontró la Comuna. Es decir, al igual que los marxistas, trataron de dirigir una lucha de clases que se disparó por sí misma y no participando en un movimiento con un pequeño grupo aislado.
Pero la lección más importante de la Comuna fue dar un ejemplo de cómo organizar a la sociedad después de la revolución. Entonces, permitió a Marx y Engels completar con esta idea el Manifiesto comunista, desarrollándola en La Guerra civil en Francia. Lenin también utilizó el ejemplo de la Comuna en El Estado y la revolución. Lo que explican estos teóricos es que las masas no pueden tomar el Estado cómo tal, tienen que destruirlo y construir uno nuevo. Los ejemplos más concretos de la Comuna fueron: la supresión del ejército permanente (instrumento de la opresión burguesa) y la supresión de la burocracia con la elección de los funcionarios y el salario limitado.
En efecto, el Estado burgués es un instrumento de opresión contra la clase obrera y un instrumento de opresión no puede volverse un instrumento de emancipación.