Congreso Mundial de Agosto: Formando una internacional digna de su nombre
Tonalli Guerrero
El Congreso Mundial 2025 de la Internacional Comunista Revolucionaria representó un paso firme en la construcción de una dirección revolucionaria. Reunió a 300 comunistas de las numerosas secciones y grupos que conforman la Internacional. México, Taiwán, Pakistán, Italia, Inglaterra, Estados Unidos y otra decena de países reunidos por un mismo fin.
La sesión tuvo lugar en agosto del presente año en Italia de forma presencial y compartida virtualmente con decenas de camaradas a lo largo del mundo. Esto refleja la máxima expresión de la seriedad de la organización y la magnitud que está adquiriendo a escala mundial.
La ICR y sus raíces en la historia
La ICR no surgió de manera espontánea. Es producto de un largo y complejo proceso en el que el mayor reto fue mantener el hilo ininterrumpido de nuestra línea y programa político. Hereda la experiencia de las Internaciones previas y de sus cuadros revolucionarios, junto con la claridad política inquebrantable de quienes preservaron la continuidad del marxismo. Sus raíces se encuentran en la Cuarta Internacional fundada por Trotski, que buscaba mantener viva la tradición del marxismo revolucionario frente a la traición de la socialdemocracia y el estalinismo. Sin embargo, tras la muerte de Trotski y sin una dirección clara, la Internacional se vio sometida a un proceso de degeneración. Bajo la dirección de Pablo y Mandel se impulsó un revisionismo que significó la adaptación al estalinismo y al nacionalismo burgués así como perspectivas incorrectas de los movimientos en la lucha de clases, lo que abrió un ciclo de crisis y fragmentación. Una de esas corrientes resultantes, impulsada por Ted Grant y en contra de la dirección degenerada de la Cuarta, mantuvo la línea del cual la ICR es heredera directa.
Perspectivas para la acción
La política revolucionaria necesita perspectivas mundiales claras. Sólo comprendiendo el rumbo del capitalismo y sus crisis es posible organizar a la clase trabajadora. La historia del movimiento obrero lo confirma. Cada gran derrota fue precedida de errores en las perspectivas. La ICR defiende que la claridad en la teoría es claridad en la acción.
Vivimos un período de crisis, guerras y revoluciones. El declive relativo del imperialismo estadounidense es evidente en sus crisis internas, la polarización política y la pérdida de hegemonía. Paralelamente, China emerge como potencia capitalista en ascenso, disputando mercados, inversiones y zonas de influencia. Lejos de estabilizar al mundo, esta disputa entre potencias lo empuja hacia nuevas tensiones, guerras y choques. Estos procesos no son simples movimientos geopolíticos, sino síntomas de un sistema que ya no puede desarrollarse como antes lo hacía. En este escenario, la clase trabajadora mundial será llamada a intervenir y será necesario un partido que sepa dirigirla hasta las últimas consecuencias.
La burguesía organiza sus fuerzas a escala internacional y la clase obrera necesita un instrumento que unifique experiencias, luchas y dirección política. Ese instrumento es la ICR, heredera de la experiencia de Marx, Engels, Lenin y Trotski.
Revolucionarios profesionales por la construcción de la Internacional
Nuestro papel como revolucionarios profesionales es vital, el peso de las tareas de la historia yace sobre nuestros hombros. Es por eso que la Internacional requiere cuadros formados, estructuras sólidas y capacidad de intervenir activamente en la lucha de clases.
La ICR ha ganado militantes en países gobernados por la derecha, la izquierda reformista e incluso bajo regímenes autoritarios. Este avance refleja que la conciencia de las masas se desarrolla y que sus sectores más avanzados buscan organización y claridad en la lucha por una salida revolucionaria de la barbarie capitalista. Un ejemplo claro de este proceso es el crecimiento de la sección norteamericana bajo un régimen imperialista y en un país que, durante décadas, fue terreno fértil para el desarrollo del capitalismo.
México es un país con profundas dificultades económicas, políticas y sociales, donde la juventud y la clase trabajadora empiezan a enfrentar los límites de una administración de “izquierda reformista”. A pesar de ello, la sección ha logrado un crecimiento a grandes pasos en el último periodo y es, particularmente, la juventud la que ha encontrado su eco en la Organización y ha dado paso a este desarrollo asumiendo y renovando roles de dirección. En el congreso mundial se reafirmó este proceso. La mayoría de los delegados de la sección provenían de los sectores más avanzados de la juventud.
La sección se encuentra hoy en vísperas de un momento histórico, su Congreso Fundacional de Octubre. Este evento significará el salto a la formación del Partido Comunista Revolucionario. Implicará la necesaria profesionalización del trabajo así como el fortalecimiento de todas las estructuras del partido. El Congreso requerirá un esfuerzo enorme por parte de la sección y cada uno de sus militantes. Una muestra de la profesionalización que se está impulsando es el lanzamiento de campañas económicas y el trabajo que se realizó con el Fondo De Lucha en el Congreso Mundial. Todo esto con el objetivo de poder financiar el histórico Congreso de Octubre.
El capitalismo ofrece crisis, guerra y barbarie. La ICR ofrece organización, programa y futuro. La tarea está planteada, camaradas: transformar la crisis capitalista en una revolución socialista.