El pasado 20 de junio del año en curso, el compañero Félix Emiliano Jiménez Pérez, profesor y militante de nuestra organización hermana Frente de Escuelas Democráticas febrero 25 (Fedef-25), fue declarado como desaparecido. Un mes después de estos hechos el compañero fue encontrado con vida. Lo que ocurrió es que el compañero fue levantado por un grupo armado, en el centro del municipio de Chimalhuacán, al que fue a realizar una operación bancaria.
Ante las amenazas de muerte hacia sus familiares más cercanos, realizadas por el grupo que lo levantó, el compañero decidió romper toda comunicación con ellos y se refugió en un municipio del Estado de Hidalgo. Sin embargo, a casi un mes de su desaparición, el compañero fue encontrado con vida, aunque con señales de lesiones por los golpes que recibió de sus captores.
Que el compañero Félix haya aparecido con vida, tras una fuerte campaña de lucha exigiendo su aparición, es una noticia que nos llena de alegría. Lamentablemente vivimos en un contexto en el que una gran parte de los desaparecidos son encontrados sin vida, en otros ni siquiera se logra encontrar sus cuerpos. Hasta el 15 de marzo de 2024 la cifra ascendía a la escandalosa cantidad de 99,729 registros de personas desaparecidas o no localizadas en la República, esto según datos del gobierno federal. La cifra real puede ser mayor por aquellos casos que no están tipificados como desaparición o bien porque no se ha realizado la denuncia ante las autoridades, aunado al aumento de los casos no contabilizados en los meses recientes.
A lo que respecta al Estado de México, que es en donde se ubica Chimalhuacán, en lo que va del año se tienen registradas a 12,436 personas desaparecidas. Dicho municipio se encuentra dentro de los primeros diez con mayor número de desaparecidos a nivel estatal.
Lo anterior nos deja claro el nivel de indefensión en el que nos encontramos los habitantes bajo el contexto de barbarie capitalista, pero, sobre todo, los activistas o militantes de organizaciones en lucha. En el caso de Félix Emiliano Jiménez lo que vimos fue un claro ataque y amenaza dirigidos hacia un activista y hacia su familia que juega un papel destacado en la lucha de clases en el municipio.
Por otra parte, si bien el actual gobierno del Estado de México y del municipio de Chimalhuacán son de Morena, eso no ha significado hasta el momento que los crímenes y desapariciones hayan cesado, muy al contrario, van en aumento. Por un lado, las condiciones de marginalidad y violencia no han cambiado y por otro la forma en la que las autoridades atienden los casos sigue siendo muy deficiente. Por ejemplo, en el caso de Félix, la fiscalía llegó a señalar que el compañero estaba de “vacaciones” o en un “retiro espiritual”.
Lo importante a resaltar es que, aunque Morena gobierne en el Estado de México y en diversos de sus municipios; el PRI, junto a diversas organizaciones que operan a su favor, siguen teniendo fuerza dentro y fuera del gobierno. Porque la llegada de estas administraciones no ha significado un cambio en las políticas de seguridad, ni tampoco se ha realizado una purga de los cuerpos policiales en los que algunos elementos están vinculados a grupos delictivos o del narcotráfico. Lo que este caso demuestra ante todo es que el Estado sigue siendo un instrumento que no da justicia a los trabajadores y por ello es necesaria la organización independiente de nuestra clase.
Lamentablemente el compañero Félix no pudo reconocer a sus captores, ni tampoco queda del todo claro los motivos concretos por lo que lo agredieron. Lo que queda claro es que fue un ataque político al amenazar a activistas sociales de manera directa. Ante su aparición, no es descartable que sus agresores busquen atentar nuevamente contra él, contra sus familiares o contra Fedef-25. Y justamente por eso la Organización Comunista Revolucionaria, sección mexicana de la Internacional Comunista Revolucionaria, exigimos el esclarecimiento de los hechos y el castigo a los responsables, tanto a quienes concibieron el “levantón”, como a quienes lo llevaron a cabo. Asimismo, exigimos seguridad para todos los miembros de Fedef-25 y a la familia Jiménez ante cualquier represalia.
