Reseña a Canoa: Memoria de un hecho vergonzoso
GB Puebla
Canoa: memoria de un hecho vergonzoso del director Felipe Cazals es una película estrenada en el año 1976 que narra los acontecimientos ocurridos en el pueblo de San Miguel Canoa, Puebla, en 1968, cuando un grupo de jóvenes trabajadores fue linchado tras ser acusado de ser comunistas. Canoa, en ese sentido no solo es la dramatización de una tragedia, sino una potente denuncia sobre el poder que ejerce la ideología dominante impregnada en el fanatismo religioso y la manipulación mediática que ejerce la clase dominante (ya sea de las autoridades eclesiásticas o el mismo Estado que criminalizaban a los grupos comunistas) así como la relación dialéctica de estas, en una de las épocas más oscuras de México del siglo pasado.
Sinopsis
El largometraje sigue a un grupo de trabajadores de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) y sus planes para aprovechar el puente, organizando una excursión a La Malinche, no obstante debido al mal clima se ven obligados a pasar la noche en el pueblo de Canoa. Así, nos vemos inmersos en una atmósfera de tensión y desconfianza mientras observamos cómo los pobladores de la localidad reaccionan y actúan, permeados por el ambiente de desconfianza social, movidos por los hilos de la iglesia católica quienes no simpatizaban con las movilizaciones sociales del periodo. Frente a estos invitados no deseados, se reflejan los procesos políticos y un tenso ambiente nacional que reverberó incluso en una localidad pequeña como Canoa, que si bien aislada, no está exenta de los intereses sociales, políticos y religiosos de la época.
Cinematografía
La película mezcla diferentes géneros que van desde el documental hasta el thriller psicológico pasando por la crónica. La cinta aprovecha inteligentemente de los recursos del lenguaje cinematográfico: No sigue una cronología lineal, nos confronta desde el principio con el desenlace de la historia, jugando en todo momento con los elementos que tiene a su disposición, rompiendo la cuarta pared y encarando al espectador al hacer que no solo juegue un papel pasivo sino que se sienta inmerso en la historia, siendo un elemento activo de la crónica.
Memoria de un hecho vergonzoso
La película se estrena en 1976, ocho años después de los eventos que describe. La realización de la película debe entenderse en el contexto en el que se realizó, siendo un intento del Estado mexicano de desmarcarse públicamente de los macabros acontecimientos ocurridos casi una década antes, pasando por una revisión intensa de Secretaría de Gobernación y de la Dirección General de Cinematografía que fungieron como última autoridad en la cinematografía nacional en el periodo. Se hicieron algunas concesiones para su producción y distribución, explicando así el papel de salvadores que juega el ejército y las instituciones gubernamentales en la última media hora del largometraje.
De los eventos ocurridos en la película podemos encontrar dos principales responsables:
La ideología dominante son las ideas de clase dominante y estas ideas abogaron por la reacción contra los movimientos estudiantiles y comunistas. Podemos afirmar sin temor a equivocarnos que el actor intelectual del linchiamento es el párroco Enrique Meza Pérez, principal líder político y religioso de Canoa, bajo su dirección se administraron servicios públicos como el agua o la electricidad, aunque miembros del pueblo reclaman la extorsión de dinero a cambio del uso de servicios públicos. Durante los 15 días previos al luinchamiento, se encolerizó a los pobladores señalando a los comunistas como secuestradores y ladrones, forzando a sacar la conclusión de que cualquier intrusión foránea debería de ser tratada como una amenaza a la religión y las buenas costumbres.
Las condiciones de atraso de Canoa, si bien remarcables, no eran ni de lejos una excepción. La falta de una infraestructura económica, vial, hidráulica y educativa fueron gestionadas a través de corrupción y compadrazgos por el párroco.No debemos de perder de vistas que estas condiciones no son fortuitas sino son las limitantes propias de un Estado burgués reaccionario incapaz de proveer las condiciones dignas de vida y educación, además de desplegar una persecución política, lo que concluyó con los trágicos eventos transcurridos en la película.
1968
1968 fue un año de revoluciones a nivel global. En México, los eventos de Canoa ocurrieron a escasas 2 semanas de la matanza de Tlatelolco, otro ejemplo sobre el estado reaccionario del Estado y la iglesia en su infinita paranoia anticomunista y que encontró su sangrienta conclusión en el asesinato de estudiantes y luchadores sociales. Recae sobre el lector el ejercicio de reivindicación y recuerdo, que en tanto existan injusticias en el mundo existirán personas dispuestas a denunciarlo y debe ser a través de la unión de las luchas estudiantiles y obrera, bajo un mismo programa revolucionario, lo que nos permitirá hacerles frente de manera organizada a los distintos brazos represivos del Estado en manos de la burguesía.
Ni reír ni llorar, comprender
Como comunistas nos resulta insuficiente el hacer una lectura de acontecimientos pasados, es indispensable entenderlos profundamente para intervenir en los que vienen. Nuestra tarea se encuentra en la explicación paciente de nuestros objetivos y nuestros métodos, sólo con la vinculación con las masas, sus preocupaciones y sus inquietudes podemos llevar a cabo nuestras responsabilidades históricas con nuestra clase.
Canoa no es más que una pequeña muestra de lo que es capaz de hacer la burguesía para mantener sus privilegios a costa de nuestras vidas. Los actores materiales enajenaron su ira en unos jóvenes sin comprender que el verdadero enemigo no venía de fuera, ni de la capital ni de la universidad, sino que estaba en casa, comiendo y engordando a su costa como un cacalotl embustero y manipulador que encauza los sentimientos de la masa y los lleva a la reacción.
Si viste Canoa y si también tiemblas de ira al ver las noticias de la barbarie capitalista, nosotros los comunistas tenemos un lugar para ti. Entendemos que la naturaleza del problema es sistémica y no se va a resolver linchando a unos cuantos culpables. Luchemos juntos por un país donde puedas disfrutar de la naturaleza sin miedo al linchamiento, por una educación gratuita y el derecho al libre tránsito. Si estás harto de este sistema, únete y ayúdanos a construir un mundo más justo.
