El día jueves 17 de octubre del año en curso, los jóvenes universitarios y tecnológicos, una vez más expresaron lo que los demás sectores sociales somos incapaces de expresar y canalizar, en este caso la gran inconformidad popular con el servicio de transporte público colectivo en la ciudad capital y Estado de Querétaro; el mal trato de los operadores; la incapacidad de concesionarios; pero, en especial, el desprecio, arrogancia y prepotencia del gobierno, cuya expresión más clara fueron gritos de repudio directos y sin rodeos al Gobernador del Estado Francisco Domínguez Servién y su partido el PAN, quien se ha caracterizado por ser intolerante, ante los reclamos de la ciudadanía, reprimiendo y encarcelando a líderes sociales en el Estado.
Los reclamos, tal y como se escucharon a lo largo de la marcha de protesta, como muy pocas marchas, avanzaron sobre los carriles centrales de Av. 5 de febrero que es la carretera federal 57, una de las más transitadas y que es la primera vez que es tomada por un contingente de protesta, lo que es histórico en las luchas de movimientos sociales en Querétaro. Para después tomar av. Constituyentes hasta el Instituto Queretano del Transporte, que lejos de tener voluntad, fue cerrado y abandonado y al llegar a palacio de gobierno en plaza de armas en el centro histórico fue lo mismo sin recibir atención de quien se supone debe escuchar los reclamos de la ciudadanía. En los últimos tres sexenios se han suscitado aumentos al precio del pasaje que es notoriamente desproporcionado al aumento del salario mínimo y en general a los ingresos de las familias trabajadoras y de los sectores populares en general. Con una arrogancia se ha despreciado la situación que viven familias que tienen que transportar diariamente a sus hijos a la escuela de todos los niveles.
Es por todo esto que la juventud universitaria, caracterizada por una educación más crítica y posturas más independientes, puede cuestionar el poder a diferencia de otros sectores que somos incapaces de dar. Los jóvenes con su vigor, energía y frescura estudiantil que, desde luego se siente agraviada, pusieron como demanda central: el cumplimiento a la promesa del Gobernador como candidato a brindarles servicio gratuito a ellos, a las personas de la tercera edad y a los discapacitados. Lejos de que el servicio no ha mejorado, obligándolos a pagar más de lo debido y caro, además de los ejes estructurantes, que significa concesionar carriles a las empresas de grandes capitales, las cuales se benefician con el despojo de las concesiones que se explotan familiarmente, destrucción de los pocos árboles y reducción de carriles a el tránsito vehicular y que ha propiciado embotellamientos en una ciudad que crece y crece con las mismas vialidades y restringiendo los estacionamientos afectando al comercio en general.
Hoy fueron los estudiantes y es un claro mensaje al Gobernador, que se rodea de un equipo que no escucha y sí intimida, desacredita y pretende engañar a los solicitantes que demandan solución a sus problemas sociales, es un mensaje de que estamos ante una sociedad más demandante, más activa y menos pasiva como se vio en la marcha estudiantil.
*Sociólogo y miembro de la Izquierda Socialista Querétaro