Por: Karen Campos
Una nueva etapa de lucha de clases ha iniciado en nuestro país, el triunfo de Morena en las pasadas elecciones fue avasallador, inclusive en estados donde el PRI históricamente nunca había perdido una elección, en esta ocasión lo hizo, perdiendo gobernaturas y el control de los congresos locales, este fue el caso del estado de Hidalgo.
Hidalgo ha sido un estado muy marginado y azotado por la pobreza y la falta de oportunidades, es de ahí que no se extraña que sea uno de los estados implicados hasta la médula en el robo de combustible o huachicoleo, que derivó en la tragedia de Tlahuelilpan, donde 132 personas perdieron la vida.
El gobierno federal está siendo muy firme y ha dado pasos adelante por el desmantelamiento de las líneas de corrupción desde las altas esferas de Pemex, hasta los cárteles formados para incurrir en este delito. Dentro de este proceso de investigación y combate, en una declaración emitida durante las conferencias de prensa mañaneras del presidente Andrés Manuel, se dijo que una universidad pública, estaba involucrada en un fraude y lavado de dinero millonario a Pemex.
De acuerdo con una investigación hecha por la Auditoría Superior de la Federación, esta institución académica se vincula al lavado de dinero por 150mdd, proveniente de 22 países vía Suiza y Mundo Global, esta última empresa, vinculada directamente con la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo.
La UAEH desde el patronato liderado por Gerardo Sosa Castelán, firmó un contrato muy amplio con esta empresa donde no se puede especificar la relación comercial concreta, además de que este se celebró 11 días después entre las empresas que defraudaron a Pemex.
La empresa Ethan Gas Oil LLC celebró un contrato con Pemex para la fabricación de carros tanques para la transportación de combustible, y esta empresa a su vez, subcontrató a Mundo Global, ubicada en Sahagún Hidalgo para su fabricación.
Como es de conocimiento de la gran mayoría de los hidalguenses, los Sosa Castelán son una mafia que se ha apoderado de la universidad y la controla por completo, utilizando sus influencias para movilizar a los estudiantes y trabajadores de acuerdo a su conveniencia política. Ahora ésta mafia, se ha incrustado en Morena, aprovechando la ola de ímpetu de transformación social de las masas y del oportunismo que se permitió al interior del partido, consiguió el control de 9 diputados de Morena. Sumado al fraude y al lavado de dinero a Pemex, las auditorías a la universidad, han destapado que la institución dio dinero a la hija de Sosa Castelán de 798 mil 808 pesos, por concepto de becas y otras ayudad para programas de capacitación.
La coladera de los fraudes se esta destapando, la basura y vicios proveniente de ella, se encuentran incrustados en el seno del partido en Hidalgo. Es claro que si se pretende conseguir un verdadero cambio para la población hidalguense esa mafia debe desaparecer. Es necesario incentivar la organización de los trabajadores y los estudiantes de la universidad para poder combatir políticamente a esta escoria.
Como estudiantes y trabajadores de la UAEH, debemos organizar un contrapeso que permita arrebatar el poder al patronato y generar órganos democráticos de decisiones para que los recursos sean invertidos en mejorar y proveer las condiciones necesarias para el desarrollo social y educativo del estado.