Regeneración es uno de los periódicos más influyentes de la historia del movimiento revolucionario de nuestro país. Muchos de los que encabezaron la revolución de 1910 a 1917 estuvieron vinculados a éste de alguna forma o fueron sus lectores. Sus escritos animaron a la lucha obrera en las míticas huelgas de Cananea y Río Blanco. Se ha dicho que los magonistas son los precursores de la revolución mexicana, eso es una verdad pero incompleta. Ellos quisieron llevar adelante la revolución más radical pero fueron derrotados. Aun con ello su legado se mantiene y dentro de él el papel que jugó la prensa revolucionaria: Regeneración.
Engels escribió en alguna ocasión “el socialismo, aunque tuviese sus raíces en los hechos materiales económicos, hubo de empalmar, al nacer, con las ideas existentes” (Engels, Federico, Del Socialismo Utópico al Socialismo Científico). La revolución que dejó atrás los residuos del colonialismo monárquico español, conocida como La Reforma, tuvo que combatir los privilegios y propiedades de la iglesia. El liberalismo mexicano, con buenos jacobinos en su historia, contra todo pronóstico, hizo una revolución radical triunfante a mediados del siglo XIX, que por sus condiciones históricas adquirió un carácter burgués. En un país analfabeta la palabra escrita se hizo obsesión de los revolucionarios liberales y las ideas llegaban al pueblo iletrado.
El porfirismo contradijo muchas de las aspiraciones de la revolución liberal mexicana de mediados del siglo XIX. El colmo fue el restablecimiento de una alianza con la iglesia. Entonces muchos conservadores se sintieron seguros y muchos liberales se hicieron conservadores. La tradición de crítica liberal no se perdió, los periódicos de verdadera oposición eran buena expresión de ello. Si bien la mayor parte de la prensa era condescendientes y otros fueron cooptados, otros más sufrían de la represión y eran censurados y aplastados. En esas condiciones nació Regeneración en 1900, un 7 de agosto. Su lema era más que ilustrativo: “Periódico jurídico independiente”, fundado por Antonio Horcasitas, Jesús y Ricardo Flores Magón.
Aquí se conjugan la generación que mantenía la defensa de la constitución liberal de 1857 con una nueva generación que iba más allá y fue madurando la idea de un rompimiento total con el régimen porfirista y a la postre con el sistema capitalista en su conjunto. Horcasitas abandonaría la redacción de Regeneración y el periódico fue asumido por la nueva generación que cambió su slogan por: “Periódico de Combate”.
Regeneración tuvo cuatro etapas (aunque dos de ellas están muy unidas) y en otros momentos sus impulsores tuvieron que cambiar de nombre como aquel que dirigiría Práxedis Guerrero: Revolución. La primera etapa de regeneración va del 7 de agosto de 1900 a octubre de 1901. Salía 4 veces al mes (los días 7, 15, 23 y último de mes) en un formato doble carta (tabloide) con 16 paginas. Se imprimía en la imprenta del prestigiado periodista Filomeno Mata donde hoy está el club de periodistas en el centro de la ciudad de México.
La primera etapa inicia con artículos de denuncia de arbitrariedades en los juzgados. Coincide con la creación del importante club liberal Ponciano Arriaga y la convocatoria, hecha por el ingeniero Camilo Arriaga, a la realización de un congreso liberal, que tuvo lugar en San Luis Potosí. Los artículos de Regeneración dieron tal popularidad a Ricardo Flores Magón que fue electo delegado al congreso por uno de los clubs de San Luis Potosí que leía el periódico. Regeneración estuvo a la izquierda en este congreso y tras él vendría una mayor proyección.
El congreso se realizó cuando la reelección de días se había consumado. Los artículos de Regeneración en general no atacaban directamente a Díaz, aunque si se ensañaron contra Bernardo Reyes. Al final la represión contra los liberales se desató. Ricardo y Jesús Flores Magón fueron encarcelados en mayo de 1901 (Juan Sarabia, Soto y Gama y Librado Rivera también serían apresados en enero de 1902), aun así mantuvieron la publicación de Regeneración hasta que en octubre es clausurado, cerrando la primer etapa de publicación de este periódico. Tras salir de la cárcel, Ricardo y Enrique, junto con Santiago de la Hoz asumen la dirección de El Hijo del Ahuizote. Nuevas censuras y nuevas cárceles no dejaron otra salida que el exilio.
El exilio llevó a la Junta del Partido Liberal Mexicano (PLM) a establecer nuevos vínculos con migrantes y exiliados mexicanos (viejos opositores de Díaz) y trabajadores en Norteamérica. Se hace un esfuerzo para comprar una imprenta y restablecer la publicación del periódico. En momentos las condiciones del exilio son muy duras.
“La pobreza del grupo es total. Duermen en el suelo enrollados en cobijas. Se alimentan de café sin azúcar y ‘pan de gallina’, que son mendrugos duros pero baratos que remojan en agua y recalientan en el horno” (Bartra, Armando y Barrera, Jacinto, La revolución magonista).
El 4 de noviembre de 1904 se publica nuevamente Regeneración. “El periódico tiene un formato grande y cuatro planas, se tiran 11,000 ejemplares” (ibidem). Pero en menos de un año duplicarían su tiraje a 22 mil.
Hay fricciones y divisiones entre los exiliados liberales pero el periódico aún consigue convertirse en un aglutinador. Los ataques de Porfirio Díaz llegan a la frontera, hay un intento de asesinar a Ricardo Flores Magón y tienen que inmiscuirse tierra adentro del territorio Norteamericano para continuar con la labor de publicación del periódico.
Los liberales habían leído textos socialistas sobre todo anarquistas pero también de Carlos Marx. Pero fue en el exilio donde Ricardo establece una relación más estrecha con el anarquismo, teniendo discusiones con Emma Goldman y Florencio Basora. Eso llevaría a un radicalismo de un ala del PLM y a la postre a una escisión abierta.
Camilo Arriaga seguía defendiendo las ideas del liberalismo mientras Ricardo planteaba la revolución social, además que comenzaba a configurar la necesidad de la lucha armada, apoyada en las clases explotadas, como el camino de transformación. Camilo plantea una reforma política apoyada en los sectores oligárquicos desplazados y descontentos con el porfirismo. Los exiliados, radicalizados e ilegalizados, inclinan la balanza del debate a favor de Ricardo Flores Magón.
Tras esa ruptura se emite un Manifiesto en Regeneración que llama a la lucha abierta contra la dictadura porfirista. Ese giro a la izquierda fue respondida con una nueva ola represiva aumentando los costos de envió de la prensa desde EEUU a México y con el encarcelamiento de dirigentes de Regeneración. Periódicos y clubs opositores en México y socialistas en EEUU hacen campaña por la liberación de los presos y juntar sus fianzas. Tras salir de la cárcel inicia un intenso debate sobre el programa del Partido Liberal Mexicano. El acoso constante de dos gobiernos que se coordinan para atacar a los revolucionarios los lleva a emigrar a Canadá. La represión los seguirá sin importar fronteras pues la lucha de clases no tiene patria.
Regeneración era un organizador colectivo que extendía sus redes a México en torno al cual se organizaban clubes del Partido Liberal Mexicano, pero que cada vez aglutinaba a sectores empobrecidos, intelectuales con condiciones de vida de los trabajadores, indígenas en resistencia o trabajadores mismos. El periódico recibía colaboraciones y daba orientaciones que guiaban la lucha. El programa del partido se discutió colectivamente, no solo entre la Junta Organizadora del PLM sino entre los propios lectores y colaboradores. El periódico hizo un llamado a que se mandaran propuestas para la elaboración del programa. Eso permitió a la dirección tener una visión más amplia para redactar el que se considera el programa más acabado de la revolución mexicana.
El liberalismo plantea la igualdad ante la ley, el programa del Partido Liberal Mexicano demanda justicia social. No es aún un programa socialista, es un programa mínimo pero donde se establecen por primera vez demandas claras a favor de campesinos y obreros. El programa busca dar contenido a la revolución que ellos impulsaban usando el periódico como correa de transmisión para la creación de círculos liberales que debían convertirse en organizaciones políticas clandestinas para avanzar en la lucha frontal contra la dictadura.
Regeneración sacó un número especial con el programa con un tiraje más de 10 veces mayor a lo habitual: 250 mil ejemplares y una versión en cartel de medio millón para que pudiera ser pegado. En total se publicarían 750 mil ejemplares del programa.
Esta agitación tendrá un efecto, abonando a catalizar la lucha obrera en las textiles y mineras, donde ya se habían creado círculos liberales de obreros. Las huelgas de Cananea y la huelga general textil con epicentro en las fábricas La Rosita y Rio Blanco serian pequeñas revoluciones que terminarían derrotadas sangrientamente por la dictadura porfirista. El PLM pensó iniciar una insurrección desde Cananea, algo que no consiguieron pues la huelga fue espontanea y rápidamente reprimida sin dar tiempo a extender la lucha. Tras la derrota de esta huelga el PLM realiza su primer frustrado intento de insurrección armada. Es incorrecto buscar atajos para la revolución y eso le costaría caro al partido.
En Septiembre de 1906 se da un intento de insurrección que es frustrada, la Junta directiva del PLM, que se había trasladado a la frontera, fue detenida, incluyendo a Juan Sarabia. Ricardo Flores escaparía de milagro. Más de cien militantes del PLM serían detenidos. Regeneración seria clausurado en ese mes dando final al segundo periodo de vida de esta prensa.
Bloqueado Regeneración, el PLM sacó un nuevo periódico llamado Revolución iniciándose su publicación el 1º de junio de 1907. Los dirigentes libres finalmente serian encarcelados y la redacción del nuevo periódico cayó en manos de un joven talentoso llamado: Práxedis Guerrero. El nuevo periódico tuvo un tinte más claramente socialista, anarquista. El mismo Ricardo Flores Magón diría: “Revolución está hermosísimo. Los felicito a todos y especialmente a Práxedis. ¡Qué brillante pluma!” (Vargas Valdés, Jesús, Práxedis G. Guerrero y la otra revolución posible).
En nuevos intentos insurreccionales frustrados Práxedis perdería la vida. Después de tres años de cárcel sin poder tener un órgano de prensa finalmente Regeneración reaparecería en 1910, en septiembre, en su última etapa que se prolongará hasta 1918. Es el tiempo de la revolución mexicana.
Regeneración estableció una red de trabajo internacional, su periódico tuvo versiones bilingües y traducidas al inglés e italiano; también mantuvieron colaboraciones con otros periódicos ácratas internacionalmente. Hay un cuento del escritor socialista estadounidense Jack London que da cuenta de la labor del PLM llamado El Mexicano. Compañeros John Kenneth Turner, que se haría famoso con la publicación de los artículos que conformarían su libro México Bárbaro, colaborarían en algún momento con este movimiento revolucionario. Una capa de mujeres hizo una labor revolucionaria muchas veces de forma silenciosa, podríamos mencionar a la misma Ethel Duffy Tuner quien sería además biógrafa de Ricardo Flores Magón y del PLM.
El magonismo estuvo hecho de una madera diferente a otros opositores. Los métodos tradicionales de represión de la dictadura porfirista no los doblegaron, cada cárcel y cada censura los radicalizó. En su radicalismo y en medio de la represión brutal el magonismo sufriría escisiones y terminaría aislado. Particularmente fue complicado tener una posición adecuada frente al movimiento encabezado por Francisco I. Madero que fue realmente masivo aunque su programa no planteó un rompimiento real con los terratenientes y capitalistas, no rebasó a un cambio de régimen y un cambio político democrático sin abordar el problema de fondo: la justicia social y por tanto acabar con el sistema de explotación.
El magonismo hizo un último intento de llevar adelante su revolución en Baja California con un ejército internacionalista que quiso liberar un territorio en la frontera para establecer y extender el socialismo internacionalmente. Su derrota marcaría definitivamente su marginación en la revolución misma.
Regeneración mantuvo su labor, el 23 de septiembre de 1911 publicaría un nuevo programa que es claramente anticapitalista y plantea acabar con el estado y que los trabajadores tomen en sus manos las tierras y las fábricas. Ahí aparecería por primera vez el lema: Tierra y libertad, que sería retomado por el zapatismo.
El magonismo no comprendió al villismo con quien tuvo desencuentros; tuvo acercamientos con los zapatistas y en algún momento un ofrecimiento para establecer su imprenta en el territorio liberado por el Ejercito Libertador del Sur. Además de la tierra y los ingenios azucareros tenían bajo su control una fábrica de papel. Inexplicablemente los magonistas no aceptaron establecer el periódico en la Comuna de Morelos.
Ricardo Flores Magón fue un anarquista pero muy poco ortodoxo. Defendió la creación de un partido político fuertemente centralizado, saludó a la revolución rusa de Lenin y Trotsky viéndola como el inicio de la revolución mundial.
Armando Bartra, en su época de radicalismo juvenil, tras la lucha de 1968, compara muy bien a Regeneración con la Iskra leninista:
“En torno al periódico se instrumenta toda una táctica y una línea de organización. A unos cuantos meses de su fundación Regeneración se transforma en educador, agitador y organizador colectivo. Se constituye en la espina dorsal de una organización política y, en sus mejores momentos, de un gran movimiento de masas. La concepción de Lenin sobre el papel de un periódico político y las ideas de Gramsci sobre el ‘intelectual colectivo’ y la redacción de un periódico, constituyen una racionalización de lo que, para RFM, fue una concepción política más o menos intuitiva. La ‘vía Iskrista’ para organizar y cohesionar un partido y un proceso revolucionario, que Lenin formula en el ¿Qué hacer?, tiene infinidad de puntos de coincidencia con la vía magonista para impulsar el proceso revolucionario en México” (Bartra, Armando, La Oveja Negra).
Regeneración da cuenta de la evolución política que dio paso al nacimiento del socialismo en México, ya no en pequeños grupos marginales sino en un movimiento, aunque minoritario, con un cierto alcance de masas. Los estalinistas mexicanos se referían al magonismo como el precursor de la revolución mexicana pero no fue sino hasta cuando José Revueltas lanza su crítica Ensayo sobre un proletariado sin cabeza que lo reivindica como precursor del socialismo en México.
El magonismo tuvo limitantes, aunque hay puntos de contacto con Lenin y el papel de la prensa, no desarrollaron un partido de cuadros como el bolchevique. Las limitantes del anarquismo, aunque poco ortodoxo, salieron a relucir en la práctica revolucionaria mientras que los bolcheviques aplicaron el método marxista para analizar dialécticamente las condiciones concretas de la revolución en Rusia, lo cual les permitió establecer una estrategia y tácticas adecuadas, llevadas adelante por un partido que se forjó en hierro, en la teoría revolucionaria y les llevaría a la toma del poder.
Regeneración fue sobre todo un periódico de agitación, los escritores tenían la capacidad de explicar procesos complejos en pocas palabras, tenían que aprovechar el poco espacio disponible y lo hacían bien. Ricardo fue un agitador nato, en su evolución se transformó en un defensor incansable de las ideas del socialismo. Sus escritos no solo explican ideas revolucionarias, también enseñan el corazón palpitante del revolucionario, están llenos de poesía transformadora que hoy siguen inspirando a jóvenes y trabajadores que luchamos por la revolución social.
La represión no dejaría de tocar a la puerta del magonismo. Ricardo Flores Magón y Librado Rivera serian encarcelados nuevamente en EEUU en 1918 poniendo fin definitivamente a la publicación de Regeneración. En su último número hay un artículo sobre la revolución rusa que dice:
“Nikolai Lenine, el leader ruso, es en estos momentos la figura revolucionaria que brilla más en el caos de las condiciones existentes en todo el mundo, porque se halla al frente de un movimiento que tiene que provocar, quiéranlo o no lo quieran los engreídos con el sistema actual de explotación y de crimen, la gran revolución mundial que ya está llamando a las puertas de todos los pueblos; la gran revolución mundial que operará cambios importantísimos en el modo de convivir de los seres humanos.
Las dimensiones de Regeneración, reducidas a dos pobres páginas nos forzan a no traducir todas las declaraciones de Lenine, y lo lamentamos, porque estas declaraciones, así como las del otro líder ruso, León Trotzky, arrojan fuerte luz sobre el movimiento revolucionario ruso” (Oropeza, Ubaldo, El Impacto de la Revolución rusa en México).
Éstas líneas hablan que Ricardo fue ante todo un revolucionario autentico, que fuera de dogmas, buscó el camino para alcanzar el socialismo.
Los Estados Unidos de principios de los veintes vivían una época de histeria anticomunista, que llevó a la represión de movimientos como los de Trabajadores Industriales del Mundo (IWW), el incipiente Partido Comunista y, por supuesto, el movimiento anarquista. Producto de ese ambiente Ricardo Flores Magón no podía salir de la cárcel más que muerto, las condiciones absolutamente inhumanas de su cautiverio profundizaron el deterioro de la salud de Ricardo, el cual murió el 20 de noviembre de 1922. Ya sea que, como dice Librado Rivera y Enrique Flores Magón, fuese asesinado o que su deceso se haya debido a sus múltiples males, se trató de un crimen de estado.
Mucho es el legado de Ricardo Flores Magón, en este caso hacemos énfasis en su trabajo como periodista revolucionario y llamamos a las generaciones presentes y futuras a que mantengan en alto las banderas. La denuncia del régimen explotador y el llamado la rebelión no pueden cesar aún en las condiciones mas difíciles, la vida de Ricardo Flores Magón lo demuestran.