Telefonistas se manifiestaron el día 17 de marzo de 2020, por la inconformidad con la reciente revisión salarial entre Telmex y el STRM, agrupados en las corrientes sindicales Telefonistas Construyendo Democracia, el Frente Telefonista Alternativo (Planilla Roja), Colectivo de telefonistas ZAPATISTAS, la Red Nacional Telefonista, Compañeros de secciones foráneas: Hermosillo, Querétaro, Guadalajara, Xalapa, Puebla Morelia, Monterrey, Culiacán.
La revisión salarial de este año entre el Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana (STRM) y Telmex se presenta en condiciones poco comunes. Al igual que en 2020, cuando la negociación se prolongó durante varios meses, hoy nuevamente la dirección sindical encabezada por Francisco Hernández Juárez decide prorrogar casi un mes más, llevando el vencimiento para el 20 de mayo, cuando debía concluir el 25 de abril. Antes de esta última fecha, no hubo ninguna oferta de aumento salarial por parte de la empresa. Si acaso, hubo algunas pláticas sobre el tema de la materia de trabajo.
La dirección sindical activó unas medidas de presión entre las cuales se incluía impedir el paso de los terceros a las instalaciones, pero esta vez Telmex respondió suspendiendo los anticipos de salario y los préstamos en general. A los pocos días el secretario general retiró tales medidas en un encuentro con la empresa y representantes de la Secretaría de Trabajo y Previsión Social (STPS), pero la empresa sigue sin liberar por completo el dinero para la regularización de los anticipos y préstamos.
Ya estamos cercanos al vencimiento de la prórroga, pero tampoco la empresa ha ofrecido una propuesta de aumento ni el secretario general ha hecho nada por presionarla. Por el contrario, implementó un plan con 8 acciones, que va más enfilado hacia el gobierno federal que a Telmex, pues incluyó solamente un mitin frente a las instalaciones corporativas de la misma.
Exponiendo a los telefonistas a riesgos de contagio, de manera irresponsable en la sección Matriz convocó al zócalo el 1 de mayo y con pase de lista. A los pocos días organizó una mañanera el 6 de mayo nuevamente frente a Palacio Nacional, que resultó un fiasco, pues ocuparon más espacio los vehículos del sonido y el templete, que los asistentes. De igual forma, en las secciones foráneas los mítines convocados por la dirección nacional también fueron muy deslucidos y con una mínima trascendencia.
¿Qué lo hace enfilar las baterías contra el gobierno federal, el Senado y el IFT? Ciertamente, la necesidad de un nuevo marco regulatorio de las telecomunicaciones y la eliminación de las medidas impuestas a Telmex por dicho instituto. Pero lo hace a unos cuantos días de las votaciones del 6 de junio donde se renovarán gubernaturas, diputaciones y otros poderes locales. En consecuencia, es claro que tanto Telmex como el secretario general han politizado la revisión salarial al empalmarla con las elecciones nacionales e incluso es posible que tengamos una huelga impulsada por ellos para usarla de presión contra el gobierno federal. Sería una huelga patronal.
Sin embargo, los trabajadores no olvidamos que la huelga es el arma de lucha de la clase obrera. Si es necesario y continúa la cerrazón de la empresa, no nos queda otro camino que prepararnos para una huelga real- y no de caricatura, como lo hizo el secretario general hace años-, pero en defensa de nuestros derechos y no para servir de moneda de cambio en la presión de los dueños contra el gobierno federal.
Será para oponernos al canje de una parte de nuestra pensión jubilatoria por acciones de Telmex de dudoso valor, contra los aumentos salariales diferenciados, por el cubrimiento de las miles de vacantes, por la reposición por los dueños del faltante en el fondo de pensiones, por el pago de utilidades para los activos y la jubilación para todos, conforme a la cláusula 149, así como para demandar la devolución de la materia de trabajo que nos han sustraído.
*Telefonistas Construyendo Democracia