Durante la semana del 23 al 30 de julio, se celebró la escuela de verano de la Corriente Marxista Internacional en el norte de Italia, con la participación de compañeros venidos de todas partes del mundo, desde Pakistán a Canadá, México, Brasil, Venezuela y Sudáfrica. De Europa, asistieron compañeros de Gran Bretaña, Italia, Francia, España, Alemania, Suiza, Suecia y Yugoslavia, entre otros lugares. En total, unos 400 camaradas de todo el mundo participaron en este emocionante evento.
«Este es particularmente relevante cuando se observa el estado de los países ex coloniales ahora», continuó Aaron, «que aún sufren el legado del imperialismo occidental y la forma arbitraria en que se trazaron sus fronteras, así como la continua explotación económica por parte de países capitalistas avanzados del mundo».
Perspectivas para la revolución mundial
La escuela mundial comenzó, como siempre, con intervenciones de compañeros de todo el mundo sobre las perspectivas de la revolución internacional. Los camaradas dieron cuenta de los tumultuosos acontecimientos que ocurren en sus respectivos países, enfocando un análisis marxista sobre los movimientos de masas de los trabajadores y jóvenes que están saliendo a la superficie en todas partes.
Alan Woods presentó la discusión, incidiendo en que 2019 será un año particularmente negativo para el capitalismo mundial. Una de las características más notables en todo el mundo, comentó Alan, es la pérdida del control de la situación política por parte de la clase dominante en países como Gran Bretaña, Estados Unidos y Brasil, ante demagogos poco fiables como Boris Johnson, Trump y Bolsonaro, respectivamente. El sistema se enfrenta a una profunda crisis política, con divisiones emergentes por arriba, una característica que con frecuencia es presagio de revolución.
Por otro lado, señaló Alan, la crisis del capitalismo significa que las reformas otorgadas en el pasado ya no pueden ser aceptadas por la clase capitalista. La crisis del capitalismo es, por lo tanto, también una crisis del reformismo. Por esta razón, la clase trabajadora buscará cada vez más el camino de la revolución.
Las huelgas internacionales masivas y combativas de los estudiantes contra el cambio climático, concluyó Alan en su respuesta, son una indicación de la dirección hacia la que se dirigen los acontecimientos, a medida que una nueva generación se levanta para exigir un cambio sistémico fundamental. El capitalismo está literalmente matando a nuestro planeta y amenazando la supervivencia de la vida en la tierra. La única solución es la revolución socialista.
La gran traición
La escuela mundial de la CMI también fue sede del lanzamiento del nuevo libro de Alan Wood:s La revolución española contra Franco: la gran traición. El derrocamiento de Franco en España en la década de 1970 es un suceso que rara vez se discute en la mayoría de los círculos políticos, precisamente porque este fue, en realidad, un movimiento revolucionario de la clase trabajadora.
Sin embargo, la traición de los líderes reformistas y estalinistas, en lo que ahora se conoce como la «transición» española, allanó el camino para una restauración de la monarquía y la continuación del régimen franquista reaccionario a la cabeza del establishment español.
La escuela mundial acogió con entusiasmo este nuevo libro, que no sólo proporciona una descripción de primera mano de estos acontecimientos revolucionarios, sino también un análisis en profundidad de las lecciones para los marxistas y revolucionarios de hoy. Los 100 ejemplares disponibles se agotaron rápidamente. ¡los lectores aún pueden solicitar su ejemplar por Internet a través de Wellred Books!
Crisis en Europa
Junto a estas charlas inspiradoras, también hubo muchas sesiones que cubrieron una variedad de temas sobre teoría marxista, historia y actualidad. Discusiones introductorias sobre economía y filosofía marxistas, y la visión marxista de la historia, así como charlas temáticas sobre las crisis políticas y económicas que afectan a Europa y Gran Bretaña.
Dora de UCL Marxists dio este informe de la sesión sobre la crisis de la Unión Europea:
“En esta sesión, discutimos la dinámica económica del proceso de integración en Europa. El proyecto inicial previsto por la clase dominante francesa, de una unión políticamente dominada por ella misma, con Alemania actuando como la potencia económica, se ha derretido ante el poder del imperialismo alemán. Bajo el capitalismo y dentro de la UE, no se puede hablar de libertad y democracia mientras el capital reine libre.
“También discutimos la división dentro de la izquierda en muchos países sobre la cuestión de la UE, tal vez expresada de manera más cruda en Gran Bretaña. Varias contribuciones señalaron que el Brexit expresa fundamentalmente una división en la clase dominante y que, como marxistas, no debemos subordinar nuestra política a ninguna de las alas de la clase dominante.
«Debemos rechazar la noción de que la UE es una institución progresista y combatir las ilusiones entre los que exigen «permanecer y reformar». Sin embargo, debemos rechazar igualmente la retórica de los Tories Brexiteers, con sus llamamientos chovinistas a un retorno a la «soberanía nacional». Como Marx declaró en el Manifiesto Comunista, ¡los trabajadores de todos los países deben unirse! Dentro o fuera de la UE, nuestra tarea es derrocar el capitalismo y luchar por la transformación socialista de la sociedad».
Eleanor de la sección noruega, proporcionó este informe de la discusión sobre la visión marxista de la historia:
“En una sesión increíblemente fructífera sobre el materialismo histórico, muchas de las afirmaciones falsas de los capitalistas fueron respondidas utilizando un análisis científico del pasado. Por ejemplo, una de las críticas más comunes al socialismo es que va en contra de la «naturaleza humana», porque se dice que los humanos son inherentemente egoístas. Sin embargo, durante cientos de miles de años, este no fue el caso. No había propiedad privada, aparte de unas pocas posesiones personales. Como escribió Engels, fue el comienzo de la agricultura hace unos 10.000 a.C., y la producción de un excedente por primera vez, lo que creó el surgimiento de las clases dentro de la sociedad, centradas en la cuestión de quién controlaría dicho excedente.
«Por lo tanto, durante la mayor parte de la historia de la humanidad, no estuvo en nuestra «naturaleza» ser codiciosos y atesorar propiedades, sino vivir en sociedades nómadas y comunistas. En resumen, la naturaleza humana está conformada por nuestras condiciones materiales. Y a medida que cambian las condiciones materiales, también lo hace la naturaleza humana. Por lo tanto, el marxismo sostiene que la llamada «naturaleza humana» puede cambiar y lo hará en el futuro bajo el socialismo. A medida que la escasez desaparezca, también lo hará cualquier avaricia o competencia.
“También discutimos el origen de la opresión con el desarrollo de la propiedad privada. La sociedad se dividió entre los explotados y los explotadores, entre los productores y los propietarios del excedente. La lucha entre estas clases recién establecidas significaba que la clase dominante necesitaba asegurar su posición oprimiendo a los trabajadores. En unos pocos cientos de años, esto condujo a la creación del Estado, que consiste en cuerpos de hombres armados para mantener la ley y el orden, defender la propiedad privada y mantener a las clases explotadas en su lugar. Como bien dijo Marx, «la historia de toda la sociedad existente hasta ahora es la historia de la lucha de clases». Dado que la opresión comenzó con la sociedad de clases, la única forma de terminar definitivamente con dicha opresión es derrocar a la sociedad de clases».
¡La colecta recaudada muestra confianza en las ideas marxistas!
Además de las muchas discusiones políticas interesantes que se llevaron a cabo, también se organizó una recaudación de fondos extremadamente exitosa para el fondo de lucha de la CMI. Este dinero es vital para ayudar a mantener y expandir la pagina web, In Defence of Marxism, y también para construir lazos con marxistas en todo el mundo: desde las Américas hasta Asia y África.
Como es tradición, en la última noche de la escuela, los compañeros se turnaron para cantar canciones revolucionarias de sus respectivos países. La pasión exhibida marcó un final apropiado para una semana increíble.
Sin duda, las reuniones internacionales anuales de los capitalistas en Davos y en otros lugares, hoy por hoy, están marcadas por un sombrío ánimo de pesimismo. Los marxistas, por el contrario, nos sentimos llenos de esperanza y entusiasmo, confiamos en la fuerza de nuestras ideas y en el potencial de ver el socialismo en nuestras vidas.