En días pasados, a cientos de trabajadores eventuales (nómina 8) de las alcaldías Álvaro Obregón, Miguel Hidalgo, Coyoacán, Magdalena Contreras, Azcapotzalco y de varias más, les han finalizado su relación laboral. Hablamos de tipos de empleos a los que se les denomina “Programas de Estabilidad Laboral” que son plazas por Tiempo Fijo y Prestación de Servicios u Obra Determinada. La contratación de estos trabajadores se da de forma anual. Este tipo de empleo fue creado en el año 2015, anteriormente se les conocía como trabajadores eventuales. Se supone que a partir de la aplicación de este programa los trabajadores “adquieren” estabilidad laboral y la permanencia en el servicio, para lograr una mejor calidad de vida propia y para sus familiares.
La mayoría de estos trabajadores, a pesar de contar con esta supuesta estabilidad laboral, son marcadamente precarizados, teniendo los salarios más bajos del tabulador del mismo programa. No cuentan en la práctica con posibilidad de ir creciendo laboralmente. Frente a la incertidumbre de si continuará su contratación para el año siguiente, podemos decir que en la actual administración varios alcaldes han tomado la decisión de despedir a los trabajadores que pertenecen a esta nómina. Pueden quedar sin empleo en medio de la pandemia y la nueva ola de contagios en que nos encontramos, sabiendo que las autoridades gubernamentales dejarán a los trabajadores y sus familias en un abandono, sin ingresos económicos para ir solventando a través de su trabajo sus necesidades básicas para sobrevivir. Les quitan el derecho a un trabajo, que supuestamente es digno.
Años y años de trabajo de los mismos compañeros los respaldan, la mayoría de ellos tienen una antigüedad mínima de 4 años. En el mes de enero del año 2022, de la noche a la mañana, pasan de ser trabajadores activos a desempleados. En las alcaldías ya mencionadas se inicia el movimiento por la reinstalación de los trabajadores con nomina 8, de todos y cada uno de ellos para así se les regrese su contrato y continuar con la labor que realizan.
Cabe mencionar que la alcaldesa de Álvaro Obregón, la panista Lía Limón, aseguró que los trabajadores despedidos son aviadores. La definición tradicional de “aviador” es “una persona que cobra sin trabajar”, cosa que es totalmente falsa. Esos trabajadores de nómina 8, junto con los trabajadores basificados sin digito sindical, somos los que hemos estado trabajando durante toda la pandemia, expuestos a contagios y con la incertidumbre de que si enfermamos y llegáramos a fallecer a causa del COVID-19 dejaríamos a nuestras familias desamparadas sin algún ingreso financiero para su bienestar y seguridad social. No han valido la pena todos los días de esfuerzo para brindar un servicio de calidad a la población, por que unos cuántos personajes políticos han decidido dar por finalizado el trabajo honroso y dignó que desempeñan los y las trabajadores de nómina 8, atacando y cuestionando la labor que realizan día con día por el bien de la población.
Sabemos perfectamente que cada administración de los alcaldes dura 3 años. Durante sus campañas electorales adquieren demasiados compromisos con la gente que les apoya. Para cumplir con varios de ellos los representantes de las Alcaldías siempre tienen bajo la manga estas plazas de nómina 8 “ESTABILIDAD LABORAL”, ya sea de cualquier partido político, de cualquier color, llámese como se llame, adquieren estos compromisos desplazando a los trabajadores. Como siempre, nosotros los trabajadores somos los que sufrimos este cambio de administraciones.
Mantendremos la lucha para la continuidad de los contratos de los trabajadores de las diferentes alcaldías en las que despidieron a los compañeros. Decimos: ¡Ya basta de políticas de compromisos! ¡Ya basta de PRECARIEDAD para los trabajadores de estabilidad laboral!
Es necesaria la unidad, la organización y la movilización de los trabajadores para luchar por la estabilidad laboral y mejores condiciones de trabajo.