Desde hace unos meses Ernesto Zedillo, quién fue presidente del 1° diciembre de 1994 al 30 de noviembre del 2000, inició una andanada de críticas contra el actual gobierno de Claudia Sheinbaum e incluso sobre el sexenio de AMLO. El expresidente priísta siente que tiene autoridad moral suficiente como para atacar a los gobiernos de la 4T, sin embargo, y sin hacerle el caldo gordo a la oposición, pero tampoco sin defender a los gobiernos reformistas; quiénes padecimos el mandato de Zedillo, sabemos que en su gobierno se enriqueció a un puñado de empresarios y banqueros, sumiendo en la más vil miseria a millones de mexicanos, además de que reprimió violentamente la lucha del pueblo trabajador —las masacres de Acteal, El Charco y la de Aguas Blancas—.
Una de sus principales críticas es que México, según él, se encamina a una autocracia de partido único, como cuando no había elecciones competitivas, ni justas, enfatizando que el Poder Judicial no era independiente. También se refirió al número de representantes en la Cámara de Diputados, alegando la sobre representación de Morena.
Pero al parecer su memoria se ha borrado o tiene lagunas mentales, pues se le olvida que el PRI gobernó durante 71 años, fue el partido único, porque aunque había una oposición, ellos se las arreglaban para ganar —a cómo diera lugar—. Por ejemplo, su predecesor, Carlos Salinas, llegó a la presidencia por medio de un escandaloso fraude en 1988. Acerca de la sobre representación también se le olvida que entre 1994 y 1997, el PRI contó con 300 de los 500 Diputados y con 98 Senadores, de los 128.
Lo anterior cobra relevancia porque en 1995, Zedillo, impulso una reforma al Poder Judicial, reduciendo de 26 a 11 el número de ministros integrantes de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, así como la creación del Consejo de la Judicatura, también se estableció un límite de 15 años para ocupar el cargo que antes era vitalicio. Al parecer no fue tan democrático el proceso, el PRI tenía mayoría en ambas cámaras y, por si fuera poco, la Suprema Corte fue cerrada por un mes, solo por la decisión de una persona.
Pero dejemos a un lado la lluvia de declaraciones de Zedillo, para pasar a lo que realmente nos interesa abordar, el Fobaproa, algo que al parecer tampoco recuerda el expresidente.
El Fobaproa y la crisis económica
Para poder abordar este tema, es necesario regresar al sexenio de Salinas pues aunque éste se lava las manos y culpa a la administración de Zedillo, la génesis de la crisis la encontramos en la víspera de 1994.
La llegada de Carlos Salinas de Gortari a la presidencia no fue de manera legal o democrática, fue impuesto por un vil fraude, aunque en aquel entonces se dijo que “se había caído el sistema” cuando el candidato del Frente Democrático Nacional, Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, llevaba cierta ventaja.Poco después, mágicamente cuando el sistema volvió a funcionar, el candidato del Frente ya iba perdiendo la elección y al final ya no pudo recuperar la ventaja, dándole así el triunfo al priísta.
Ya instalado en la silla presidencial Salinas fue el impulsor de una política económica en la que se favorecía la inversión extranjera y la venta, en realidad, el abaratamiento de empresas públicas —en otras palabras, la aplicación del neoliberalismo—, como Teléfonos de México, para desarrollar la infraestructura de cara al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) con Estados Unidos y Canadá. Durante su gestión todo era color de rosa:
“La popularidad y credibilidad de Salinas de Gortari alcanzaron altos niveles, ya que la burbuja de crecimiento económico, propiciada por la estabilidad y la baja inflación, hizo pensar a muchos políticos y medios de información que ‘México estaba a punto de convertirse en una nación de primer mundo’. De hecho, nuestro país fue la primera de las naciones recientemente industrializadas en ser aceptada en la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) en mayo de 1994.”
Sin embargo, el peso estaba sobrevaluado y la situación económica no era tan saludable, si a esto le sumamos los diversos acontecimientos que sucedieron a lo largo de 1994, tenemos una receta acabada para una crisis económica, pues lo constante fue la inestabilidad; “el elevado gasto gubernamental en obras públicas, lo cual se tradujo en un déficit histórico; la emisión histórica de tesobonos para cubrir ese déficit; prácticas bancarias relajadas, y problemas políticos”; como levantamiento armado del EZLN y el asesinato de Luis Donaldo Colosio, candidato presidencial del PRI a las elecciones de ese mismo año, fueron claves para la crisis que se profundizaría en 1995.
Poco después de que Zedillo tomará posesión, tuvo una reunión con empresarios mexicanos y extranjeros en donde se les informó de manera privilegiada de la devaluación que vendría, en la que inicialmente se planeaba subir la banda de la tasa de cambio fija en un 15%, es decir, hasta 4 pesos por dólar, de los 3.4 pesos en que se encontraba en promedio en ese año. Con esa información los empresarios y banqueros compraron dólares al por mayor, blindaron sus bienes y sacaron su dinero del país, lo que agravó la crisis, pues la reserva de dólares que había en el país se redujo considerablemente.
Como una medida urgente, a principios de 1995, se decidió establecer el sistema de libre flotación del peso, al no poder mantener la nueva banda de la tasa de cambio, la cual llegaría a 7.20 pesos por dólar en tan sólo una semana.
Lo anterior puso en riesgo a los bancos, la quiebra era casi inminente, pues la cartera vencida se triplicó hasta alcanzar el 44% a inicios de 1995. Zedillo puso en marcha un conjunto de medidas dispuestas a salvar a la banca, todas financiadas por el Fondo Bancario de Protección al Ahorro (Fobaproa). Creado en 1990 por Salinas de Gortari, se creó con el objetivo de servir como herramienta de contingencia ante crisis financieras que pusieran en riesgo la solvencia de los bancos, tanto por el incumplimiento de sus deudores como por el retiro masivo de depósitos, con la capacidad para financiar o comprar cartera a la banca múltiple.
Con la devaluación del peso, la fuga masiva de dólares y el rescate bancario, millones de mexicanos perdieron sus ahorros, sus hogares y vehículos. En pocas palabras, en unas semanas perdieron su patrimonio, por el contrario, los dueños de los bancos recibieron carretadas de dinero público, a pesar de que la deuda era privada.
En 1998, Zedillo propuso convertir en deuda pública los 552,000 millones de pesos (unos 65,000 millones de dólares) desembolsados en el rescate de los bancos de 1995. En agosto de 1998, el PRD (nacido del Frente Democrático Nacional en 1989) convocó a una consulta nacional y distintas movilizaciones contra el proyecto gubernamental; sin embargo, en septiembre del mismo año, un acuerdo impulsado por el PRI y el resto de facciones partidistas, como el PAN, sacaron adelante la iniciativa y los pasivos del Fobaproa finalmente se convirtieron en deuda pública.
El Fobaproa fue un salvavidas para los banqueros, pero la entrega de los recursos nunca fue clara sobre los montos otorgados, ni tampoco se supo el número ni quiénes se beneficiaron. La versión oficial dice que se destinaron para asegurar los depósitos de 13 millones de ahorradores. No obstante, hubo un súbito enriquecimiento de un grupo de banqueros y hombres de negocios allegados al Gobierno, así como algunos prófugos de la justicia, develaron que había dos varas con las que la administración de Zedillo media el apoyo que brindaba, ya que mientras la carga de la nueva deuda pública impactó directamente en recortes al gasto social y empresas estratégicas en manos del Estado, el salvamento de algunos banqueros multiplicó su capital tras declararse insolventes, aunque no necesariamente estaban en la quiebra.
A 30 años del Fobaproa —ahora Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB)—, “se han pagado un poco más de 2 billones de pesos, a precios actualizados a marzo de este 2025. Se debían 688 mil millones y el gobierno ha pagado más de 2 billones de pesos y, de acuerdo con información de la Secretaría de Hacienda, todavía se adeudan un billón 127 mil 264 millones de pesos de pagarés y 32 mil 220.8 millones del programa de apoyo a deudores, en total un billón 159 mil 484.8 millones. Se trata de un pasivo cuyo fin está en el infinito.”
A manera de conclusiones
De manera resumida podemos ver qué el Gobierno de Zedillo siguió la línea de Salinas, al igual que todos los del PRI, es decir, enriquecer a una ínfima minoría parásita, mientras que la mayoría de la población nos tuvimos que apretar el cinturón por la devaluación y el encarecimiento de la canasta básica.
Aunque actualmente las cosas han cambiado muy poco. Por ejemplo, en la administración de AMLO, Carlos Slim incrementó su riqueza pasando de los 52 mil 900 millones de dólares a 94 mil 200 millones. Muy a pesar del discurso de que la política económica de Morena se ha alejado del neoliberalismo, por la vía de los hechos vemos lo contrario.
La actual administración bien podría negarse a seguir pagando una deuda que, en primer lugar, nunca debió de asumirse, pero se hizo porque el PRI en el gobierno estaba sobre representado en ambas Cámaras, en segundo lugar, ya se ha pagado bastante —unos 2 billones de pesos—, en tercer lugar, actualmente los bancos pueden arreglárselas solos, no es necesario que se siga pagando para que funcionen, porque incluso se sigue pagando a bancos que ya no existen, o el peor de los casos es que los banqueros, que obtuvieron pagares del gobierno, hace mucho que han recuperado su crédito y amasado enormes ganancias.
La administración de Sheinbaum debería de dejar de pagar esa deuda y el dinero se debería destinar a la educación, salud y vivienda, así como a los programas sociales del gobierno. Y en caso de una negativa de los banqueros, el paso sería la nacionalización de la banca, algo que debió haber hecho Zedillo, pero por su lógica neoliberal jamás fue una opción. Si es cierto que nos hemos alejado de las políticas neoliberales, se debería de llevar adelante la nacionalización, eso sería un acto de soberanía nacional, como tanto le gusta decir a la presidenta.
Pero, siendo honestos, es algo que no realizará, porque hasta ahora hemos visto dos realidades en nuestro país: una, la de las Conferencias del Pueblo, en dónde se ataca a la derecha, a los empresarios y banqueros, en la que se expone la corrupción y demás vicisitudes; y, la otra, en la que se dan largas a los intereses y necesidades del pueblo trabajador, como lo hemos notado en el tema de la reducción a la jornada laboral —40 horas—, aun cuando Morena tiene todo para hacerlo.
Por esa razón es que los comunistas nos organizamos, porque nunca veremos a los reformistas ir más allá de los límites del capitalismo, ya que para hacerlo debe de haber un gran compromiso con los intereses de los trabajadores, la juventud y las mujeres en lucha, algo que Morena y los gobiernos de la 4T aborrecen en la práctica.
Referencias
- «Ernesto Zedillo acusa a Sheinbaum de provocar una crisis constitucional». (2024, noviembre 1). Proceso. https://www.proceso.com.mx/nacional/2024/11/1/ernesto-zedillo-acusa-sheinbaum-de-provocar-una-crisis-constitucional-339606.html
- Cano, J. (2025, abril 29). Ernesto Zedillo replica a Sheinbaum; culpa a Morena y AMLO de socavar la democracia. Infobae. https://www.infobae.com/mexico/2025/04/29/ernesto-zedillo-replica-a-sheinbaum-culpa-a-morena-y-amlo-de-socavar-la-democracia/
- López, A. I. (2025, enero 24). Fobaproa: así fue el rescate bancario que se convirtió en deuda pública en México. Ediciones EL PAÍS S.L. https://elpais.com/mexico/2025-01-24/fobaproa-asi-fue-el-rescate-bancario-que-se-convirtio-en-deuda-publica-en-mexico.html
- Tavares, G. M. (2023, Marzo 12). «El día que Zedillo cerró la Suprema Corte». Contralínea. https://contralinea.com.mx/interno/semana/el-dia-que-zedillo-cerro-la-suprema-corte/
- UNAM • Conocimientos Fundamentales. (n.d.). Unam.mx. Recuperado el 8 de mayo de 2025, desde http://conocimientosfundamentales.rua.unam.mx/ciencias_sociales/Text/51_tema_05_5.3.2.html
- Delgado, Orlando. (2025, Mayo 8). «Zedillo, Fobaproa y democracia». La Jornada. https://www.jornada.com.mx/2025/05/08/opinion/016a1eco
- Villanueva, Dora. (2024, Julio 23). La Jornada: Los 5 hombres más ricos multiplicaron su fortuna con AMLO. La Jornada. https://www.jornada.com.mx/2024/07/23/economia/020n1eco