Escrito por: La Izquierda Socialista
El próximo año se cumplen 100 años de uno de los acontecimientos más importantes , que ha transformado la situación política a nivel internacional de todo el siglo pasado, en octubre de 1917 el partido bolchevique de Lenin y Trotsky fue capaz de guiar a los trabajadores y campesinos rusos al poder
Este maravilloso acontecimiento significó por primera vez, si exceptuamos la comuna de París, cómo los trabajadores son capaces de tomar el poder en sus manos, poder transformar de raíz y sacar del atraso a uno de los grandes países del mundo. Tenemos que recordar que en Rusia no existió una democracia burguesa, ni mucho menos, era el imperio de los zares, el gran Imperio que por siglos fue el signo de la reacción monárquica en toda Europa.
La participación de Rusia en la Primera Guerra Mundial había significado una tortura para el pueblo, todo se movía al ritmo que necesitaba la guerra de los ricos. Cientos de miles de trabajadores que fueron movilizados al frente estaban muriendo de frío en las trincheras, los campesinos estaban agotados y hambrientos, en las ciudades las fábricas se organizaban para la producción de la guerra. El pueblo estaba siendo agotado.
La revolución del 17 comenzó el día internacional de la mujer, con huelgas de obreras que pedían pan y paz, esta lucha rápidamente se transformó en una revolución triunfante, al derribar al odiado Zar. Los obreros, campesinos y militares se organizaron en el Soviet, asamblea de representantes elegidos de forma democrática. Este organismo fue la herramienta de los obreros rusos por su emancipación.
De febrero a octubre los trabajadores y la juventud pusieron a prueba a los diferentes partidos, programas e incluso el gobierno provisional. Ninguno daba salida a sus problemas, que no eran socialistas, pedían: pan, paz y tierra. El único partido que luchaba por esto fue el partido bolchevique, que en pocos meses pasó de 8 mil miembros a más de 250 mil. Con un programa claro y una dirección resuelta pudo llegar al poder.
La Revolución Rusa fue un maravilloso ejemplo de cómo los explotados del campo y la ciudad, bajo la organización política independiente, con una dirección dispuesta a llevar los últimos acontecimientos las ideas revolucionarias, son capaces de poder transformar de fondo la situación política del país.
La revolución rápidamente se extendió por toda Europa, fue un ejemplo para todos los trabajadores del mundo, los alemanes, italianos, húngaros, etc. se levantaron como un solo hombre para luchar por el poder. La única diferencia es que en todos estos países faltaba el factor subjetivo, el partido revolucionario que en su momento fue el factor determinante para que los bolcheviques pudiesen tomar el poder.
Este espíritu de lucha revolucionaria se materializó en la conformación de la de la Tercera Internacional, herramienta de transformación política revolucionaria que los bolcheviques aportaron a la lucha del proletariado internacional.
Desde las trincheras de la Corriente Marxista Internacional y la sección mexicana, el periódico La Izquierda Socialista, nos hemos propuesto la tarea de conmemorar todo el año esta gesta heroica de los trabajadores rusos, para recordarlo pensamos editar una serie de materiales políticos para mostrar a todos el trabajadores y jóvenes el significado y la necesidad del partido revolucionario, para cuando los acontecimientos estén maduro, poder jugar el papel fundamental.
También estaremos haciendo una serie de charlas públicas en diferentes sindicatos y escuelas tratando de aportar lo más relevante de la Revolución y explicar que este hecho sigue siguiendo lo que nosotros necesitamos ahora para resolver nuestros problemas. Nosotros optamos por una Revolución radical para tratar de resolver nuestros problemas actuales y la revolución rusa sigue siendo, no sólo una inspiración, sino un ejemplo a seguir.
En el momento actual donde el capitalismo simplemente ofrece a la juventud miseria, hambre y desempleo, el ejemplo de la revolución rusa nuevamente vuelve a ponerse sobre la mesa, la necesidad de la transformación socialista de la sociedad es más urgente que nunca.
No podemos explicar ahora, no es la tarea de este artículo, el proceso de degeneración estalinista que se vivió después de la muerte de Lenin en Rusia, basta decir que este proceso no puede ser comparado en ningún sentido con los maravillosos actos heroicos del pueblo ruso para tratar de tomar en sus manos su historia, presente y su futuro; y llevar adelante una de las transformaciones más radicales de la sociedad que se tenga memoria.
A 100 años de la revolución rusa, no sólo pensamos que sigue siendo válido la formación del partido revolucionario, pensamos que tenemos que luchar para desterrar el capitalismo, que tenemos que luchar para apoderarnos de las palancas fundamentales de la economía, planificar y ponerlas bajo control de los trabajadores, prepararnos para extender el socialismo a toda América Latina y a todo el mundo, esa tarea sigue siendo pendiente nuestro.
En este momento nuestra tarea fundamental es brindarle estas herramientas teóricas, esta experiencia histórica, a las nuevas generaciones y sacar conclusiones junto con ella sobre la necesidad de la lucha política militante, revolucionaria, como lo hizo el partido bolchevique y todos juntos poder organizar ese partido Revolucionario que sea el factor fundamental cuando los acontecimientos llamen a nuestra puerta , que sin duda lo sabrá