Escrito por David García Colín, sindicalista SUTIEMS
“Nadie resiste un cañonazo de 50 mil pesos” (Álvaro Obregón)
En el caso del grupo corrompido en el SUTIEMS -que luego fundará, por instrucciones de la JLCyA, el sindicato de traidores (menos conocidos como Sitraiems)- su proceso de descomposición no comenzará con 50 mil pesos, sino un millón, pero comencemos por el principio de esta historia -volveremos sobre el “cañonazo” del millón de pesos que le llegó a la administración del charro Miguel Ángel-. En esta sección abordaremos la primera parte del proceso de domesticación de un pequeño grupo de la dirección del SUTIEMS, una camarilla de charros que finalmente saldrán por propia voluntad del sindicato para fundar un sindicato de protección bajo el nombre de Sitraiems. Esta parte de la historia representa la lucha por mantener la autonomía, la democracia sindical y contra la corrupción, finalmente los agentes del Estado en el sindicato serán derrotados y saldrán sin necesidad de expulsiones -lo cual es la muestra más clara de que fueron derrotados políticamente-. En otra parte de nuestro texto abordaremos los intentos de reventar el sindicato desde fuera por estos mismos personajes que no pudieron hacerlo como parte de la dirección sindical. En esta batalla el SUTIEMS logra, finalmente, conservar su autonomía política con respecto al Estado.
Durante 2011 el sindicato se moviliza contra el presidente de la JLCyA, Ramón Montaño Cuadra, un personaje que bajo las instrucciones de Marcelo Ebrard implementó un operativo para arrebatar la titularidad al SUTIEMS por medio del recuento del 2011 al que ya referimos en la parte anterior de nuestra historia, además de desconocer la personalidad jurídica del SUTIEMS y negando a éste la toma de nota. En estas fechas el abogado SUTIEMS, Pablo Franco, fue muy enfático en pedir la destitución del Presidente de la Junta, varias movilizaciones y cierres de la avenida Río de la Loza dieron como resultado que Montaño cuadra se excusará del proceso de recuento y que finalmente perdiera el cargo. Sin embargo, aún siendo un importante triunfo sindical, los intereses de Pablo Franco- futuro fundador y asesor legal del Sitraiems- no eran los mismos que los sindicalizados tuvimos al lograr la destitución de un funcionario de la JLCyA, Franco quería un cargo en la Junta a cambio de domesticar al sindicato. Para entender el proceso de charrificación hay que plantear cómo al final de la negociación contractual de 2012 se ofreció un millón de pesos al SUTIEMS en la banqueta de Río de la Loza.
La revisión contractual de 2012
Con una votación de 249 por aceptar la oferta de las autoridades contra 118 por estallar la huelga, la asamblea general del lunes 4 de junio de 2012 conjuró la huelga que estaba emplazada para el día siguiente. La oferta, que finalmente fue aceptada, se puede resumir en los siguientes puntos que fueron presentados a la asamblea (varios de los cuales serán incumplidos o escamoteados por parte de la patronal y parte del siguiente Comité Ejecutivo), pegamos a continuación lo que se proyectó en pantalla en la Asamblea realizada en el auditorio SUTIN:
-Tres semanas adicionales de vacaciones (semana de pascua, una en verano y otra en invierno), además de los días 10 de mayo y 2 de noviembre.
-Ampliación de días económicos de 10 a 12.
-Homologación de la tolerancia para el registro de asistencia a 30 minutos para todos los trabajadores.
-Incremento en el monto del apoyo para anteojos, prótesis y ortopedia.
-Permiso para padres, independientemente de que el hijo esté inscrito en escuela oficial o no (ya no tendrá que comprobarse)
-Integración inmediata de Comisiones Especiales para el establecimiento del Catálogo de Puestos y Funciones (Tabulador administrativos) y del Reglamento Interno de Trabajo, así como para la regularización de las plazas nuevas (Interinos) y la normatividad para el otorgamiento del año sabático. La retabulación de los administrativos incluirá un bono de compensación cuyo montó se determinará por dicha comisión.
-Comisión para la basificación de trabajadores de intendencia, Lengua y Cultura Náhuatl, Médicos, etc. Las comisiones se integrarán en un lapso máximo de 10 días y entregarán sus resultados en un periodo máximo de tres meses.
-Rechazo explícito a las pruebas neoliberales PISA y Enlace
-El otorgamiento de un bono especial de $3000 además del incremento otorgado unilateralmente el año pasado, para todos los trabajadores. Hay que señalar que la propuesta inicial del IEMS era de un 0.8 % sobre salario, que luego de negociaciones subió a 1.0 % (alrededor de $2659 para DTI´s y cantidad variable para administrativos, según nivel) y finalmente a $3000 para todos los trabajadores. A fin de evitar un incremento en el I.S.R. a pagar, este bono se entregaría en forma de vales universales.
-Se acordó también la salida de todos los Coordinadores de Plantel que hayan concluido ya su periodo de cuatro años (casos Tlalpan 1 y Tláhuac, entre otros). Especialmente importante la destitución de la Coordinadora del Plantel Tlalpan I Adriana Ortega Luna.
-En cuanto a los compañeros de Intendencia, los acuerdos alcanzados son que disfrutarán de los mismos periodos vacacionales que el resto de los trabajadores, que el IEMS se compromete a dar seguimiento al otorgamiento de la seguridad social (IMSS) y a asegurar que puedan participar en la próxima licitación para la prestación del servicio, a través de la Cooperativa que han constituido.
Muchos de estos puntos no se cumplirán cabalmente, otros serán aterrizados por medio de un emplazamiento por violacones del 7 de mayo de 2013, el sabático no se implementará pues los charros, ahora en el Sitraiems, aceptarán su incumplimiento, como veremos más adelante.
Bazán se dirige a la asamblea, la polémica
Un elemento adicional que el sindicato supo utilizar sabiamente a su favor en aquel entonces, fue la coyuntura electoral que presionó a las autoridades del GDF, si querían evitar la huelga, a una negociación favorable a los trabajadores. En este sentido la amenaza efectiva de huelga, la preparación militante de ésta, la conformación real de comités de huelga, resultó, quizás, más afectiva que su realización. En las primeras reuniones de conciliación con la patronal, era evidente que su estrategia de charrazo -arrebatar la titularidad del CCT- había fracasado y que estaban siendo obligados a negociar con el sindicato titular. Era evidente que no querían que la huelga estallara en esta coyuntura.
En un acto inusitado, que causó mucha polémica a lo interno del SUTIEMS, Bazán Levy, director general del IEMS, solicitó al CE que se le permitiera exponer su oferta frente al quórum de la Asamblea General del SUTIEMS del 22 de mayo antes de que esta comenzara formalmente, la asamblea fue consultada y se le permitió hablar. Los que quieran consultar dicha intervención pueden verla en el siguiente link: https://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=VnZkMU94z7k
Algunos compañeros se oponían a esta exposición, argumentando correctamente que se trataba de una asamblea sindical que sólo competía a los trabajadores. Esto, por supuesto, era irrebatible, pero también lo era el que la comparecencia de Bazán frente a un auditorio repleto con más de 400 trabajadores era la aceptación tácita de la fuerza del sindicato en aquellos momentos y de que las ofertas señaladas no sólo eran frente a una dirección sindical sino frente a cientos de trabajadores dispuestos a estallar la huelga. Por lo demás estaba claro que Bazán no debía permanecer en la asamblea y mucho menos participar en los debates y votaciones. En un acto inaudito el propio Bazán Levy aceptó públicamente que el CCT vigente había sido firmado apuradamente porque no se quiso revisar con el SUTIEMS. El estallamiento de huelga que inicialmente estaba contemplado para el 23 de mayo se prorrogó para el 31 en espera de los cuatro días solicitados por la patronal para presentar una respuesta puntual. Como hemos dicho, finalmente se aceptó la oferta y la huelga no estalló.
Para entender la actitud de Bazán Levy en aquel momento habrá que añadir que existían fracturas entre el GDF y la Dirección General del IEMS sobre cómo abordar la lucha contra el sindicato. Bazán intentó reventar los acuerdos que él mismo había presentado frente al quórum del SUTIEMS haciendo inminente el estallamiento de huelga. Existe un video, al parecer filtrado por integrantes del mismo comité ejecutivo SITIEMS (el sindicato patronal), donde Bazán Levy y la dirección charra del SITIEMS conversan acerca del fracaso de su estrategia, la secretaria general de los charros (en aquél entonces) acepta que la dirección de sus sindicato estaba en la Dirección de la Junta de Conciliación y Arbitraje, mientras que Bazán se congratula de que si la huelga estallaba estaría cerca del fin de semana. En la grabación Magdalena se hace la indignada porque Bazán no tenía de otra más que sentarse a negociar con el SUTIEMS (aunque intentaba reventar las negociaciones), no sabemos si la indignación de la charra era real, lo que sí sabemos es que el SITIEMS estuvo tan acostumbrado a comer de la mano de la autoridad que era incapaz de movilizarse y ni siquiera tenía “dientes” para morder la mano que besó por tantos años. Sin embargo, a último momento, Bazán fue hecho a un lado en las negociaciones y el mismo GDF -a través de la Secretaría de Gobierno, Secretaría de Educación del DF y la Oficialía Mayor- se hizo cargo directamente de las negociación presentando una serie de puntos favorables y pidiendo una nueva prórroga (que fue establecida por el SUTIEMS para el 4 de junio) con el supuesto fin de revisar puntos centrales del pliego petitorio como la retabulación, integración salarial y la basificación.
El millón de pesos que se dio en la banqueta
Pero si la presencia de Bazán Levy en el auditorio SUTIN causó controversia, lo que resultará mucho más claro fue el intento de la JLCyA -es decir, el GDF- por cooptar a la dirección sindical. Un hecho que tendrá relevantes consecuencias fue la oferta extraoficial, literalmente en la banqueta, que hizo algún funcionario de la Junta, al finalizar la firma de conjuración de huelga de la revisión contractual 2012, de un millón de pesos. El abogado sindical Pablo Franco arguyó, pretendiendo “dulcificar” un intento corruptor, que era una práctica común al finalizar las negociaciones. Sin duda lo era (por supuesto lo es), pero se le “olvidó” mencionar que es práctica común de los acuerdos corruptos que caracterizan la relación entre charros y patrones. Eran los cantos de sirena de un personaje que seguramente ya había negociado un jugoso puesto en la Junta misma. Si bien es cierto que un sindicato tiene el derecho a aceptar acuerdos que no vulneren su autonomía e independencia -incluso beneficios económicos que sean colectivos y transparentes-, lo delicado del asunto fue que no se consultó a ninguna instancia sindical la pertinencia de recibir ese dinero y aparentemente no se pretendía informar al conjunto del CE, ni al CGR, ni mucho menos a la base del sindicato. Esto lo podemos presumir porque en el CGR inmediatamente posterior a la aceptación del millón de pesos (entrega que se concretará durante la administración del siguiente CE), los compañeros involucrados (un pequeño grupo del conjunto del CE) no pusieron el tema en el orden del día y no fue sino a pregunta expresa de un compañero del CGR -la información se había fugado de un pequeño grupo del CE al CGR mismo- que Raúl Pérez Ríos, el primer Secretario General del SUTIEMS aún en el cargo en esas fechas, tuvo que informar sobre el asunto y ese millón de pesos pasó a los fondos sindicales. Como hemos dicho, el millón de pesos se entregó finalmente al CE entrante. Si bien es cierto que el dinero se depositó en la cuenta del SUTIEMS y lo fortaleció financieramente, podemos presumir que hubo fuertes tentaciones para no informar sobre ese dinero y que el GDF pretendía simplemente comprar a la dirección sindical. Una lección fundamental de todo esto es que el sindicato debe cuidar celosamente su autonomía con respecto al Estado y que no existe ni existirá jamás buena voluntad por parte de éste, jamás entregará dinero -sobre todo de la forma casi clandestina en que se hizo- sin pedir nada a cambio. En los temas financiero y político los trabajadores sólo debemos contar con nuestras propias fuerzas y lo que arranquemos por medio de la movilización pues el que paga manda. Veremos más adelante (en la tercera parte de esta historia) que Miguel Ángel Hernández -siguiente SG- no reportó los intereses de ese millón de pesos y transfirió a cuentas personales dinero del sindicato. Hasta la fecha no hay claridad sobre los manejos del dinero durante ese periodo. La auditoría que está en proceso aclarará muchas cosas y presuntas malversaciones (repetimos que habremos de volver sobre este asunto).
En retrospectiva, la “buena voluntad” que el Subsecreatrio de Gobierno había mostrado con el SUTIEMS durante las negociaciones del 2012, no fue más que un intento de seducir y corromper al sindicato. Veremos que esto lo logró la autoridad con respecto a un grupo grupo de personajes del siguiente Comité Ejecutivo, mismos que fundarán el sindicato de protección patronal Sitraidores (menos conocidos como Sitraiems). Bazán Levy se separa del cargo y Mancera impone como Directora General a Freyia Doridé Puebla López, como parte de los pagos políticos de las tribus, especialmente a la tribu de Alejandra Barrales; fue una directora que no estaba capacitada para el cargo y que únicamente se preocupó de ubicar a su tribu como aviadores y funcionarios en el IEMS.
Poco después de esto, en febrero de 2013, el que había sido el abogado sindical SUTIEMS pasó a Presidente de Conflictos de la JLCyA, y el SUTIEMS quedó secuestrado por el despacho jurídico de un abogado corrupto. Lamentablemente muchos compañeros le siguieron el juego y lo trataron de defender más allá de lo permisible, incluso se convirtieron en sus operadores al interno del sindicato; éstos se consolaban asegurando que su presencia en la Junta nos podía ser favorable. Es verdad que Pablo Franco hizo un trabajo efectivo como abogado sindical pero una vez en la Junta era más claro aún que había cruzado el Rubicón. Formalmente quien se hizo cargo de la representación jurídica fue un títere de Pablo, su asistente Fidel González quien ni siquiera estaba titulado. Otra batalla sindical, de la que hablaremos posteriormente, será deshacernos de esta nociva representación legal que pretendía domeñar al SUTIEMS. Actualmente Fidel González se ostenta como representante legal del Sitraiems -de hecho es el que dirije este sindicato y toma la voz como si fiera SG-, lo que demuestra a todas luces los lazos con el gobierno, los chuchos del PRDy el papel de simples peleles por parte de la dirigencia formal del Sitraiems.
Veremos que no se trató de un aliado de los trabajadores sindicalizados en la Junta sino, al revés, de la corrupción de algunos dirigentes sindicales por medio de la Junta. Si al SUTIEMS no lo pudieron derrotar desde fuera, sobre todo con los recuentos del 2009 y 2011, ahora lo intentarán reventar desde dentro. Fundamentalmente sobre ese intento, que finalmente fracasará, versa buena parte de la historia sindical durante los años 2013-2015. Cabe añadir que Pablo Franco será el mismo personaje que, junto con el renegado traidor Pablo Gomez, exonerarán, como parte de la nefasta comisión del PRD, al asesino de Iguala, el narco-presidente municipal José Luis Abarca.
Parte del CE acepta el «beso del diablo», la cooptación de los Sitraidores
En agosto de 2012 se da el proceso de elección del Comité Ejecutivo. Hasta esas fechas algunos compañeros del CE habían permanecido en la dirección desde la fundación del sindicato -el primer SG, por ejemplo, se mantuvo en el cargo por 6 años- y en una Asamblea General estatutaria anterior a la de la elección del nuevo comité, se perdió por pocos votos el que el CE se pudiera reelegir parcialmente. Algunos compañeros señalaban que aún no habían suficientes cuadros para el recambio. Ante la idea de buscar un candidato de cierta unidad, se eligió como Secretario General a Miguel Ángel Hernández Vázquez. Éste, en realidad, era un personaje sin ninguna trayectoria sindical pero al pertenecer a un plantel sindicalmente fuerte (al menos en aquél entonces) -Miguel Hidalgo-, cercano al grupo hegemónico y que parecía ser un individuo honesto, la mayoría votó por él. Se demostrará, sin embargo, que una dirección política no se puede improvisar y que un sindicato debe procurar poner en puestos clave a compañeros con nivel político y probados en la lucha de clases (evidentemente hasta donde esto sea posible). Para ser justos habrá que decir que lo más probable es que Miguel Ángel no haya previsto el papel de charro que le será asignado y que aceptará gustosamente.
El día martes 7 de mayo el SUTIEMS pone las banderas rojinegras por revisión salarial y por violaciones al CCT. La huelga es levantada en día después con 271 votos a favor, 45 en contra y 13 abstenciones. Además del tema salarial la huelga logró visibilizar ante los medios -aunque fuera brevemente- otras demandas: la retención del pago a 7 docentes y sobre todo el hecho de que faltan por concluir 4 planteles alegando falta de presupuesto. El caso más escandaloso era el plantel Venuestiano Carranza en donde la comunidad se mantuvo en aulas de lámina en la explanada delegacional, sin bibliotecas ni laboratorios. Si finalmente se terminan de construir planteles como Venustiano Carranza es en gran medida gracias a la lucha del SUTIEMS. En lo económico la huelga logró un aumento salarial del 3.9% directo al salario más 2.8% a prestaciones, aumentar la prima vacacional en un 50%, se echa abajo al Plan Bazán. Sin embargo aquéllo que no se logró, y que se incluía en los 20 puntos del pliego petitorio, no se puede soslayar: la basificación de los compañeros del sistema semiescolarizado, de Lengua y Cultura Nahuatl o de intendencia (que siguen contratadas por la infame modalidad del outsourcing); no obtuvimos una mayor integración salarial ni la retabulación de los compañeros administrativos.
Por estas fechas (24 de mayo) se firma el Reglamento Interior de Trabajo. En este mes, los inconfesables lazos que unen a Pablo Franco -ahora funcionario del GDF- con sus operadores en el SUTIEMS rendirán frutos: dos de los fundadores del SUTIEMS, Franciso Martínez y Raúl Pérez Ríos, agendan una cita con el Sub Secretario de Gobierno del DF, Juan José García Ochoa; quizá la cita se tramitó con buenas intenciones (imposible saberlo con certeza pero no pudieron ignorar el acuerdo que se pactó en esa cita) pero lo cierto es que sólo se invita a una pequeña parte del CE recientemente electo: Miguel Ángel Hernández Vázquez (Secretario General), Elia Morales Bringas (Secretaria de Organización) y Frida Morales Mota (Secretaria de Finanzas), además de Raúl Pérez Ríos (por lo menos). El resto del CE tuvo que enterarse de esa reunión clandestina por un twitter del propio Subsecretario de Gobierno donde informaba sobre la reunión con el SUTIEMS. En esa reunión se convino un pacto de sumisión sindical. Los hechos demostrarán que así fue: desde esas fechas, prácticamente el despacho jurídico de Pablo Franco manejará nuestros emplazamientos a huelga de tal forma que no estallen -decidiendo unilateralmente las prórrogas sin consultar a ninguna instancia sindical y mintiendo sobre el número de veces que se podía prorrogar las huelgas- y una parte del CE, encabezada por Miguel Ángel, comenzará un progresivo proceso de corrupción. Tan es cierto esto que cuando parte de un nuevo CE intente, en 2014, sacudirse la tutela del Estado, en una mesa de negociación, el propio Subsecretario de Gobierno reclamará al CE entrante que se haya roto un acuerdo en donde no debía haber huelgas ni paros.
Otro punto que cabe señalar aquí es que, si bien consideramos firmemente que la actuación de algunos de los compañeros fundadores -en el caso que acabamos de mencionar- dejó mucho que desear -sostenemos que de una u otra forma establecieron una alianza indebida con Pablo Franco, además de sostener a su títere Miguel Ángel, incluso cuando ya era claro que se trataba de un personaje corrupto-, todo ello no debe hacernos soslayar el importante papel que jugaron con fundadores del sindicato -cosa que debe reconocerse-, junto con otros compañeros que, siendo fundadores, no participaron en actos de cuestionable calidad política, u otros que reconocieron públicamente sus errores y rectificaron para seguir adelante: sobre esto último, cabe mencionar en el primer caso al compañero Jorge Castro (que nunca se prestó a negociaciones turbias) y, en el segundo, al compañero Carlos Moncada, quien reconoció haberse equivocado y demostró su integridad personal. El tiempo y los acontecimientos ponen a cada quién en su lugar y sería deseable que los involucrados hicieran un balance crítico y honesto si realmente quieren retomar el camino. La alianza de aquéllos compañeros con Pablo Franco se romperá, pero quizá no por una cuestión de principios, sino porque su antiguo aliado congelará las demandas de antigüedad que interesaban particularmente a este grupo, también romperán la alianza con su títere Miguel Ángel, pero sólo porque éste rompió sus hilos para entregarlos directamente a los funcionarios del GDF, no había necesidad de intermediarios.
De lo que no hay duda alguna, es que el grupo charro de Miguel Ángel no había jugado ningún papel relevante en la historia del sindicato -más que ser un instrumento o títere- y que su lugar en la historia de la lucha obrera de nuestro país estará en el mismo capítulo donde están Morones y aquél otro que se vestía de charro (de donde salió nuestro término actual) Jesús Díaz de León del Sindicato Ferrocarrilero.
El tobogán de la corrupción
Pero en el terreno de las comisiones mixtas y el escamoteo de los logros obtenidos este pacto rendirá grandes frutos para la patronal y en prebendas personales para los charros. Es indudable que cualquier compañero del SUTIEMS tiene derecho a incluir en el banco de datos sindical a sus familiares, pero siempre respetando el CCT y los procesos de selección. Sin embargo, lo primero que hicieron los nuevos charros fue meter a sus familiares violentando un banco de datos y una “fila” que daba certidumbre a todos. En una carta de los planteles Iztapalapa IV, Tlalpan I, Tlahuac, Xochimilco y Área Central se reclamó el nepotismo de forma contundente: “[…] los exámenes [de admisión para obtener plazas en el IEMS] se realizan con base en un banco de reactivos elaborado 50% por las autoridades y 50% por el Comité Ejecutivo”. [Estos exámenes, al menos en parte, estaban en poder de miembros del CE, especialmente de aquéllos que proporcionaron los reactivos por la parte sindical] “se ha hecho uso de esa valiosa información para satisfacer intereses personales. En esta convocatoria participaron varios familiares de los actuales miembros del Comité Ejecutivo (Araceli Robles López, esposa Felix González Solano, secretario de vivienda; Daniel Salgado Ponce, pareja de Elia Morales Bringas, secretaria de organización; Mariana Pablo Norman, hermana de Benjamín Pablo Norman, secretario de capacitación y Ligia Morales Mota, hermana de Frida Morales Mota, ex secretaria de finanzas. Sus nombres constan el un «Listado de aspirantes que cubren el perfil de acuerdo a su academia» […] Frida Morales Mota gestionó de manera casi secreta para sí misma una promoción en el mes de septiembre de 2013 siendo parte de la CMAyP, lo cual es innegablemente incorrecto pues actuó como juez y parte. Otro antecedente es el del propio secretario general de nuestro sindicato. Teniendo ese cargo y siendo parte de la CMAyP, su hermano ganó un concurso para ocupar una plaza por tiempo determinado. Con esos antecedentes, resulta por demás dudosa la limpieza de una convocatoria donde participan no uno, sino cuatro familiares de miembros o ex miembros del CE, ahora que el CE tiene un papel relevante como nunca antes en el proceso de evaluación. (Frida Morales ya no es parte del CE pero pertenece a la corriente política que hoy es mayoría en él)”. El hermano de Miguel Ángel, Victor Hernández Vázquez, obtiene su plaza en el IEMS mediante una convocatoria cerrada, donde “casualmente” el único aspirante fue el hermano de aquél personaje corrupto.
Otros miembros del CE del grupo charro se promueven a sí mismos sus cambios de plantel, tal fue el caso de Felix Enrique Gonzalez Solano (Secretario de Fomento a la Vivienda) y Carlos Vladimir Hernández Frías (Secretario de vincuilación legislativa); éste último no sólo promovió su cambio a Venustiano Carranza sino que lo hizo con vistas a volverse coordinador de ese plantel, gracias al nepotismo de su protector Ulises Lara, quien será designado Director General del IEMS. De hecho, Vladimir promueve un foro educativo, en junio de 2013, en el nuevo Senado de la República por medio de sus contactos con los chuchos del PRD, en aquél momento se utilizó como tribuna sindical y a nadie se le impidió decir lo que pensaba -algunos nos manifestamos allí mismo en contra del Pacto por México y la Reforma Educativa, justo cuando hablaba el chucho Miguel Barbosa, presidente del Senado-, pero era claro que Vladimir ya estaba negociando con los firmantes del Pacto por México y promotores de la Reforma Educativa su hueso como coordinador, Ulises Lara se lo dará.
Otro paso más en el proceso de corrupción fue el haber cancelado derechos que habíamos logrado arrancar de forma colectiva en procesos de revisión pasados e incluso otros contemplados en la Ley Federal del Trabajo. Tal fue el caso de la cancelación del año sabático para en su lugar imponer unos “permisos con goce de sueldo” que se suponía serían provisionales, pero los charros los volvieron perpetuos con la firma de los Reglamentos de las Comisiones Mixtas en octubre de 2013, sin la obligación de la patronal para contratar interinos (es decir implementar un verdadero año sabático). Además, con la firma de los reglamentos de la Comisión Mixta de Seguridad e Higiene y el de Admisión y Promoción, se volvieron incompatibles derechos como, por ejemplo, permisos para padres y hora de tolerancia -que antes de esto no lo eran- y se le daba un poder extraordinario a la Dirección Académica para sancionar a docentes que no cumplieran con el PAP o con informes docentes, incluída la ruta hacia el despido. La base se asigna a los 18 meses cuando la LFT señala que la base se debe dar después de los 6 meses. Aún así, la movilización sindical logró meter en estos acuerdos el que los PAP (es decir los planes de trabajo docente o Programa Académico Personal) se realizaran de forma colectiva en las academias respectivas.
Oposición interna a la charrificación
Evidentemente hubo resistencia y oposición de parte de un grupo de compañeros en el CE -y, por supuesto de las bases-, el proceso de charrificación sindical incluyó el segregar a los compañeros disidentes y el que el grupo de burócratas en vías de corromperse comenzara a actuar en petit comité. De hecho las decisiones trascendentales ya no se tomaban en el CE, sino por parte del grupo que fundará posteriormente el sindicato de traidores (menos conocidos como SITRAIEMS). En este punto no hay que omitir errores propios: al principio del proceso de burocratización no era muy claro el papel que estaban jugando los individuos, es probable que ni siquiera los futuros charros lo tuvieran muy claro tampoco. El proceso de rompimiento del CE comenzó con la virtual expulsión del compañero Isidro Luna, Secretario de Prensa. Muchos pensamos en aquél momento que Isidro había cometido un grave error al haber firmado una notificación de la Junta y ante un desacuerdo en el CE en donde hubo un conato de pleito se presionó para la renuncia del compañero Isidro. En retrospectiva podemos afirmar que el compañero era totalmente honesto (en todo caso cometió un error) y los métodos burocráticos con los cuales se presionó para su renuncia marcarían un precedente nocivo que posteriormente será utilizado para linchar al ala que en el CE se opuso consistentemente al proceso de charrificación. Otra lección importante es que no es posible resolver diferencias políticas por medios administrativos o presiones burocráticas, si lo que se pretende es resolver la diferencias de forma sana. De hecho en torno a la oposición democrática de estos compañeros (unos 7 que serán expulsados del CE de forma brutal), sumada a la que había ya en los planteles, surgirán las primeras reuniones más amplias de lo que a la postre será una importante corriente sindical.
El proceso de corrupción llegó tan lejos que incluso se puso en vías de despido a compañeros opuestos a los métodos burocráticos y corruptos de Miguel Ángel y su grupo. Tal fue el caso de Alejandro Carrillo (Secretario de Asuntos Académicos) quien renunció al comité y, de manera alevosa, Miguel Ángel tarda más de quince días en entregar a Area Central la renuncia del compañero, poniéndolo en la línea de despido por faltas injustificadas. Además de ello, en el plantel Álvaro Obregón II, trabajadores no afines a Elia Morales Bringas son obligados a cambios de plantel, violando el CCT y la LFT, el objetivo fue, simplemente, vaciar la asamblea del plantel que exigía la renuncia de Morales Bringas. Incluso se consintió junto con la patronal que compañeras interinas no fueran recontratadas (en los hechos su despido), por el simple hecho de ser combativas; en este último caso fue la movilización y la oposición de compañeros en el CE las que lograron la recontratación de dichas compañeras , junto con el compromiso de asignarles plazas de nuevas creación. Los métodos policiacos y gangsteriles comienzan a ser utilizados, los charros se vuelven paranoicos, a grado tal que Miguel Ángel comienza a grabar las sesiones sindicales y de Comisiones Mixtas de forma clandestina, al tiempo que acusa a otros de hacer precisamente eso, las proyecciones freudianas obran por vías misteriosas.
La lucha contra la Ley Yuriri y la vinculación sindicato estudiantiles
Por aquéllas fechas, la asambleísta del PRD Yuriri Ayala -integrante de la corriente de Bejarano-presentó una iniciativa de ley para imponer en las prepas del DF la reforma educativa del PRI al incluir en la Ley Orgánica del Instituto las disposiciones de la Ley General del Servicio Profesional Docente, además la iniciativa incluía pasar a los trabajadores del IEMS al apartado B de la Ley Federal del Trabajo, lo cual desaparecía de facto el CCT, la titularidad del SUTIEMS y nos imponía unas condiciones generales de trabajo desventajosas, por si fuera poco nos ponía bajo la influencia del Sindicato Único priísta que administra las condiciones de trabajo en el DF. Esta intentona provoca una movilización sin precedentes el día 8 de abril -más un paro en el plantel Iztapalapa I- en la que estudiantes y trabajadores marcharon unidos. Finalmente una movilización de algunos cientos de estudiantes y trabajadores unidos logra congelar dicha iniciativa. Con ello se demostró que los aliados naturales de los trabajadores son sus propios estudiantes. En relación a la unidad con los estudiantes cabe añadir las movilizaciones que se desarrollaron en torno a los 43 normalistas desaparecidos en Ayotzinapa: en octubre de 2014 los estudiantes del IEMS se suman parcialmente a los paros que sacuden a instituciones como la UAM, la UNAM y el Politécnico ante los hechos sangrientos en Ayotzinapa, demostrando que la efervescencia estudiantil tocó las puertas del IEMS. El SUTIEMS se pronuncia a favor de la movilización estudiantil y, en planteles como Tlalpan II, incluso participa con ellos en marchas significativas y ejemplares.
Como represalia el 9 de abril de 2014 la coordinación de la histórica preparatoria Iztapalapa 1 del IEMS (Antigua Cárcel de Mujeres) reporta «obedecer» instrucciones del Director Jurídico de prohibir (sin documento alguno de por medio) el acceso a su centro de trabajo a dos compañeras administrativas. El sindicato actúo de manera solidaria apoyando a las compañeras despedidas, a pesar de la oposición de Miguel Ángel Hernández Vázquez por apoyarlas de manera económica -dado que ambas eran cabeza de familia y al menos una de ellas madre soltera- se les brinda dicho apoyo . Lamentablemente una de las compañeras despedidas, Guadalupe Zugeil Fuentes -quien fungía como Secretaria de vinculación legislativa del SUTIEMS-, después de lograr su reinstalación por medio de la movilización y aún estando liberada como representante sindical, acepta la postulación de suplente a candidata plurinominal a la ALGDF por parte del Partido de Elba Ester Gordillo, PANAL. Como hemos visto, ya antes otro secretario de vinculación legislativa, Vladimir, usó el cargo sindical para promoverse en puestos de confianza, lamentablemente no será el último. Esto fue un duro golpe al sindicato y a todos los compañeros que de forma desinteresada luchamos por la reinstalación de Zugeil. Además, fue la prueba de que la “vinculación legislativa” debe estar firmemente controlada en la línea de la independencia sindical y la autonomía política por parte de las instancias democráticas del sindicato.
Esta historia continuará…
Ver primera parte: http://old.laizquierdasocialista.org/node/4068