El 28 de noviembre se realizó en el Museo Casa León Trotsky la apertura pública de la 4ª Escuela Panamericana de Cuadros de la Corriente Marxista Internacional. Gabriela Pérez, directora del Museo habló frente a una audiencia internacional saludando la Escuela. Seguido de esto, Ubaldo Oropeza, dirigente de La izquierda Socialista, dio por inaugurada la escuela frente a un auditorio integrado por alrededor de 80 compañeros que venían de diversos países de norte, centro y Sudamérica, así como algunos asistentes europeos. El tema de apertura fue La Internacional Comunista, a 100 años de su fundación, que introdujo Alessandro Giardiello, dirigente de la sección italiana de la CMI, Sinistra, Classe, Rivoluzione.
Alessandro explicó cómo la segunda Internacional se había perdido. En el su cúpula, poco a poco, después de la muerte de Engels, fue girando al reformismo hasta su degeneración. Abandonando la lucha contra el capitalismo aceptaron las consecuencias, al grado que terminarían apoyando la guerra imperialista.
El marxista nacido en Italia siguió explicando como Lenin declararía muerta a la Segunda Internacional como organización revolucionaria y se dedicaron esfuerzos para construir una nueva internacional como lo fue la conferencia en Zimmerwald, que, pese a su confusión y heterogeneidad, fue un paso adelante para romper con el socialchovinismo. Fue cuando surge la revolución de Octubre que se convirtió en el eje y centro de la lucha revolucionaria. Lenin con sus tesis de abril reorientó a un partido que en su ausencia, su dirección estaba planteando la fusión con los mencheviques.
La revolución rusa tuvo un impacto internacional y en una serie de países europeos se dieron procesos revolucionarios como la república soviética de Hungría, la de Babaria o las ocupaciones de fábricas en Italia. Citando a Trotsky, dijo: “Sí los pueblos de Europa no se sublevan pisoteando al imperialismo, el imperialismo nos pisoteara”.
Los dirigentes bolcheviques dedicaron muchos esfuerzos para establecer vínculos Internacionales hasta que finalmente se desarrolla una conferencia que terminaría siendo el primer congreso de la internacional comunista. Éste se desarrolló, en medio de la guerra civil, del 2 y el 6 de marzo de 1919. Asistieron 52 delegados de 22 países. Se desarrolló en medio de la guerra civil. Este congreso hizo un llamado a los partidos obreros a construir la nueva internacional. Se convirtió en un polo de atracción. En países como Alemania, Francia, Checoslovaquia e Italia (donde el partido socialista voto en mayoría ingresar a la nueva internacional). En México el partido se creó el partido comunista en 1919 con exiliados atrayendo a anarcosindicalistas. Al cabo de 2 años la IC tenía presencia en todos los continentes, tenía 700 periódicos diarios y unos 3 millones de militantes.
Los dirigentes bolcheviques se basaron en el debate y en la exploración muy paciente.
Alessandro dio un repaso por algunas de las ideas principales de los primeros 4 congresos de la Internacional Comunista citó un fragmento del Manifiesto de la Internacional comunista a los obreros del mundo:
«Nuestra tarea consiste en generalizar la experiencia revolucionaria de la clase obrera, purgar al movimiento de la mezcla corrosiva de oportunismo y socialpatriotismo, unificar los esfuerzos de todos los partidos verdaderamente revolucionarios del proletariado mundial, y así facilitar y acelerar la victoria de la revolución comunista en todo el mundo».
Después de explicar algunas de las orientaciones del trabajo sindical, debatidas en el segundo Congreso el camarada Giardiello comentó cómo las masas empujaban a la izquierda a los viejos y conservadores aparatos sindicales y partidarios, es por eso que en el segundo Congreso se aprobaron las 21 condiciones. Dijo que no leería todas las condiciones pero hizo estas citas que ilustran el carácter revolucionario de la construcción de la Internacional Comunista y su combate al oportunismo:
«La propaganda y la agitación diarias deben tener un carácter efectivamente comunista y adecuarse al programa y a las decisiones de la tercera internacional».
«Toda organización deseosa de adherir a la internacional Comunista debe regular y sistemáticamente separar de los puestos (…) a los reformistas»
«Los partidos deseosos de pertenecer a la internacional comunista deben reconocer la necesidad de una ruptura total y definitiva con el reformismo y la política centralista y preconizar esta ruptura entre los miembros de las organizaciones. La acción comunista consecuente sólo es posible a ese precio”.
«Todo partido que desea adherirse a la internacional comunista debe llamarse partido comunista de sección de la internacional Comunista)».
«Todos los órganos dirigentes de la prensa de los partidos de todos los países están obligados a imprimir los documentos oficiales importantes del comité ejecutivo de la internacional Comunista».
Alessandro dijo entonces que esto refleja que se dio una batalla a muerte para echar a los oportunistas de la nueva internacional.
Explicó la lucha contra el sectarismo (aún cuando esté se diera no en pequeños grupos sino en partidos de miles), recomendó ampliamente leer La enfermedad infantil del izquierdismo en el comunismo.
El Tercer Congreso se realizó en octubre de 1921, ahí Lenin y Trotsky dieron una ofensiva contra una fuerte tendencia izquierdista pero nunca usaron métodos organizativos usaron los argumentos para convencer a sus oponentes. Trotsky por su lado explicó que había un cambio objetivo en la situación tras una serie de derrotas de procesos revolucionarios.
Tras este debate se reafirman la táctica del frente único, pues se desarrollaron nuevamente ilusiones en el reformismo, la consigna general era: hacía las masas por un frente único de los trabajadores. Se insistía en la completa independencia de las ideas.
El proceso de degeneración de la Internacional Comunista surgió en paralelo del proceso de burocratización del estado soviético y del partido ruso. La unión soviética era un país atrasado y campesino a lo que se unía la devastación causada por la guerra civil. Su única esperanza de sobrevivir era extender la revolución socialista fuera de sus fronteras pero la derrota de la revolución europea de 1919-1921 por la traición de los socialdemócratas y la inexperiencia de las direcciones nacionales de los partidos comunistas, que eran muy jóvenes, provocó una involución dentro de la capa dirigente que desarrolló tendencias burócratas, desviaciones nacionalistas y un profundo escepticismo hacia la revolución mundial. La estabilización capitalista de 1922-29 alejaba la perspectiva revolucionaria inmediata, más, el inicio de la reconstrucción económica soviética, profundizó el escepticismo revolucionario de la capa dirigente.. presentó la base para un modo de vida pequeñoburgués, “privilegio material para la burocracia».
Alessandro continuó narrando el nacimiento de la oposición de izquierda en 1923 encabezado por Trotsky y los cuadros más capacitados del partido. En el V Congreso en 1924, la oposición aún pidió defender sus opiniones oponiéndose a la teoría del socialismo en un sólo país.
Los documentos de la oposición, en el VI congreso, permitieron extenderla fuera de Rusia como fue el caso de Canadá y EEUU.
En 1935 hubo un nuevo congreso de la Internacional que formalizó la política de los frentes populares. Al final la Internacional tuvo un final indigno al ser disuelta tras un acuerdo con Hitler.
Alessandro concluyó diciendo que 100 años después tenemos que aprender las lecciones, sobre todo cuando vemos estos maravillosos movimientos de masas, desde Irak y Líbano hasta América Latina.
En su momento, la Internacional comunista generó terror y odio en la clase capitalista, y sentenció diciendo que debemos extender sus ideas y métodos a nivel internacional. Necesitamos una fuerte corriente marxista. «Camarada, la Internacional comunista ha muerto, viva corriente Marxista Internacional”.
Después de prolongados aplausos de la audiencia, inició el debate. El compañero Adrián Alvarado de México habló del impacto de la Internacional comunista en este país, mientras que también se escucharon participaciones de camaradas de Venezuela y Colombia, país que ha entrado en acción en la lucha de clase. El compañero Jorge Martín destacó como para los bolcheviques la construcción de la internacional era una tarea central que implicaba a los cuadros principales que se preparaban para la batalla política resaltando el método democrático de sus debates. También señaló que para el estalinismo es muy difícil reivindicar la tradición de la internacional comunista, negaron sus tesis y terminaron asesinando a muchos de los compañeros que la fundaron y construyeron. Hubo preguntas del publico sobre como actuar frente a las luchas que se dan hoy en América Latina, nuestra posición ante nuevos movimientos como lo es la lucha feminista.
En su respuesta, Alessandro Giardiello dijo que hubo mucha gente que mostró su apoyo a la revolución rusa pero no había comprendido el método de los bolcheviques.
Lo primero es explicar la consigna correcta, la necesidad de acabar con el socialismo, en segundo termino el no mezclar el movimiento con los intereses de la burguesía, como pasa con el acuerdo entre Piñeira y los partidos de la oposición. Se tiene que participar en las luchas pero luchando contra las direcciones reformistas que se están creando. Tenemos que luchar, como siempre lo hemos hecho, con nuestras banderas en alto, sin esconderlas. En la lucha de mujeres, así como cuando combatimos al racismo o los derechos sexuales, nosotros no estamos por la división, sino por la unidad de los explotados. Resaltó la lucha que se da hoy se da en Colombia después de años de represión estatal y del actuar de una guerrilla con una política loca, pero donde la clase obrera ha realizado dos huelgas generales en una semana. En Chile el movimiento obrero fue aplastado pero hoy empieza a resurgir. También lo que pasa en México es interesante, a pesar de todas las limitaciones que tiene el gobierno reformista de AMLO, pero donde los marxistas debemos intervenir explicando el programa socialista pero también en la universidad con un trabajo independiente. Finalizó diciendo que tenemos que reconstruir la internacional comunista, tarde o temprano con esto lograremos tomar el poder para construir un mundo socialista.