Por: Adrián Alvarado
Nuevamente la fuerza de la clase obrera ha quedado patente y se ha demostrado en el municipio, cuyo nombre podemos utilizar para adjetivar a la actual lucha que se emprende en la frontera norte del país: Heroica de Matamoros. Los protagonistas de paros, manifestaciones y asambleas de los últimos días, se han enfrentado a diversos obstáculos: la arrogancia de los empresarios que se niegan a reconocer su lucha y resolver sus demandas; el entreguismo y cobardía de los dirigentes sindicales, que deberían representarlos; el bloqueo de los medios de comunicación, que se han negado a difundir los hechos y acontecimientos; y la cerrazón de las autoridades municipales, que en teoría deberían representar esa corriente que recorre el país que desea cambios profundos, pero son incapaces siquiera de dar la cara a las demandas legítimas de los obreros.
Los trabajadores de las maquilas se han reconocido y han realizado acciones colectivas para resolver sus demandas. La represión y la amenaza de los despidos aún no los han doblegado, han recibido la solidaridad de la población del municipio y comienza a llegar el apoyo de los jóvenes y trabajadores conscientes a nivel nacional e internacional, que ven en esta lucha una fuente de inspiración.
La conciencia ha comenzado a avanzar de una forma vertiginosa y comienzan a darse cuenta del rol indispensable que la clase obrera jugamos en esta sociedad. En los diversos grupos de difusión que existen del movimiento encontramos comentarios como estos:
“La frase del supervisor: ‘aquí nadie es indispensable’ ¿y ahora quién ocupa mi lugar?, espero que con esto valoren lo que somos”. Lo escribe una obrera participante en los paros laborales y en el movimiento.
“Este movimiento sacó a la luz el verdadero rostro de los delgados (sindicales) buenos para nada que están a favor de las empresas. Mis respetos a esos que aún están en la lucha”. Escribe un obrero.
“El obrero sin patrón puede producir. El patrón no produce”. Entre los espacios informativos compartieron este mensaje, corto, claro y contundente.
Los expresan palabras de aliento a los que se mantienen firmes en los paros, otros realizan exhortos, súplicas, regaños, reproches y enuncian palabras fuertes a aquellos que han caído en la tentación de entrar a laborar. También hay obreros que comparten orgullosos las fotos de las plantas de las empresas vacías, sin producir, con la maquinaria detenida y solo un puñado de empleados de confianza adentro intentando, sin muchos resultados, echar a andar la producción.
Existe una idea que comienza a formarse en aquellos obreros que en estos días se han lanzado a la lucha: “somos los más indispensables en esta sociedad”. Y efectivamente la clase obrera es la única productora de la riqueza y valor bajo el sistema capitalista y su fortaleza radica no solamente en su peso numérico, sino en el rol que juega en la producción. Sin la clase obrera no funcionan las empresas, el transporte, las oficinas, las instituciones del Estado, los bancos, etc. Si todos los trabajadores decidiéramos, algún día, ponernos en marcha se paralizaría la economía y el funcionamiento de esta sociedad.
El gran problema es que los trabajadores no somos conscientes del gran poder que tenemos al unirnos y organizarnos, las presiones de la vida cotidiana, la moral que prevalece en la sociedad, los medios de comunicación, incluso los propios patrones de manera consiente nos desunen y dividen.
Lo que estamos observando en el municipio de Matamoros en este momento, es el inicio de lo que Carlos Marx denominó la evolución de los trabajadores de una clase en sí, a una clase para sí. Es decir, el proletariado pasa a ser una masa dispersa, desunida, concentrada en subsistir, a una clase social consciente de sus intereses, objetivos y su misión histórica.
Un día sin obreros
Por los grupos informativos de los obreros en lucha comenzó a circular la convocatoria algunos días previos a una nueva jornada de lucha que fortaleciera el movimiento y además expresara la solidaridad con aquellos que han sido despedidos o sufrido represalias. El objetivo era mantener las protestas y dar una muestra de la fortaleza del movimiento.
Recordemos que la huelga está emplazada para el día 25 de enero, las demandas fueron establecidas desde el inicio del movimiento: 20% de incremento salarial y un bono anual que fortalezca el salario. Por lo pronto las acciones se han enmarcado a esperar y generar un ambiente en torno a esa fecha, ya que la mayor parte de las empresas han rechazado las peticiones de los obreros.
“Un día sin obreros” fue la consigna, la fecha establecida fue el lunes 25 de enero y se realizó un llamado para una concentración y una movilización. Algunos medios de comunicación locales ubican la asistencia entre 4 mil y 5 mil obreros, miles más secundaron la acción no acudiendo a laborar o quedándose en las puertas de las empresas, incluso circularon algunas fotos de algunos que fueron obligados a entrar pero que dentro se negaron a trabajar.
Nuevamente esta acción muestra la consistencia del movimiento, que se ha enfrentado a todas las adversidades y cuyos liderazgos han surgido desde las entrañas de las propias empresas debido a la traición y cobardía de los dirigentes sindicales.
Durante la manifestación surgieron los gritos, los mensajes y carteles de: “Únanse”, “Obreros Unidos”, flanqueado por la bandera de huelga: “Obreros unidos hasta el final” y carteles y lonas pintadas con los nombres de las empresas, banderas de huelga, etc.
Hubo una manta en particular cuyo mensaje que se difundió con fuerza, fue realizada por dos hijos de un obrero involucrado en el movimiento, un día antes del “día sin obreros” la realizaron en su casa para acompañar a su padre a la manifestación, sonriendo la cargan para posar en la foto, un adolescente y una niña:
“La jornada de hoy pasará a la historia del movimiento obrero. Unidos todos de pie”.
Y efectivamente las jornadas de lucha de la clase obrera de Matamoros, de principios de año 2019, quedarán grabados en los anales del movimiento obrero en nuestro país. Estos acontecimientos nos muestran al nuevo periodo de la lucha de clases que estamos entrando en el país y la fuerte corriente que ha impregnado a millones de trabajadores y jóvenes en el país que desean cambios profundos y radicales, que se ha expresado en las calles en meses pasados, en las urnas el pasado primero de julio del 2018 y que ahora tenemos una nueva expresión en la inspiradora lucha de la clase obrera de Matamoros.
También, en un cartel alguien plasmó la frase de Carlos Marx:
“El obrero tiene más necesidad de respeto que de pan”.
Dirigentes sindicales, la patronal y el gobierno municipal
El domingo por la noche el dirigente del Sindicato de Jornaleros y Obreros Industriales y de la Industria de la Maquiladora (SJOIIM), el cual agrupa a la mayor parte de los trabajadores de las maquilas dio un mensaje, después de días de no aparecer en público pues estaba escondido de sus propios afiliados.
En un video difundido en los espacios oficiales del sindicato, el dirigente hizo un llamado a los obreros “al respeto” y a que las acciones se realizaran en el marco de la legalidad. En pocas palabras hizo un llamado a desmovilizar horas antes de la jornada de lucha del 21 de enero.
Ese mismo fin de semana los obreros realizaron mítines en las oficinas sindicales, debido a que los dirigentes simplemente desaparecieron de la escena pública. Eso ha generado mucho malestar en una buena parte de los obreros de la maquila que se han dado cuenta del papel traidor y timorato de sus dirigentes.
Uno de los grandes retos del movimiento es la democratización de los sindicatos, sacar a los actuales dirigentes y sustituirlos por verdaderos representantes de la clase obrera, es una consigna y lucha que se debería llevar ahora mismo que miles de obreros están en movimiento, la destitución de los actuales dirigentes es una de las condicionales para que el movimiento avance.
Para preparar la huelga del próximo 25 de enero se deberían formar comitivas por cada una de las empresas, elegidas democráticamente en asambleas, integradas por los obreros más entregados a la causa, y crear una asamblea coordinadora de comitivas que haga los preparativos para la huelga, promoviendo acciones de reparto de panfletos, de información, que realicen jornadas de brigadero entre los obreros más indecisos, preparar la logística y ser quienes encabecen los procesos de negociación. A su vez se debe hacer un llamado a toda la población para que se sume a la lucha para obligar a la patronal a resolver las demandas.
Algunas empresas han llamado a negociaciones por separado, el presidente de la Asociación de Maquiladoras de Matamoros manifestó que en 10 días de paros y manifestaciones las pérdidas ascienden a 20 millones de dólares. Explicó que el detener una línea ensambladora en una maquila cuesta 26 mil dólares. Es decir que en un minuto los obreros producen cerca de $498,420, que representa más de 2,800 veces lo que le pagan a un obrero en un día o 155 veces el monto del bono anual que se está solicitando para cada obrero.
Los patrones argumentan que no existe el suficiente dinero para pagar las demandas de los obreros, el movimiento debería exigir ante esa situación que se hagan públicos los libros de contabilidad de cada una de las empresas, que den a conocer sus ganancias.
El presidente municipal de Matamoros, Mario Alberto Hernández López, quién ganó en las pasadas elecciones del 1° de julio bajo las siglas de la coalición de Morena, Partido del Trabajo y Encuentro Social, tras la jornada de la protesta del “día sin obreros”, se vio obligado a hablar en la Plaza pública para prometer algunas soluciones al conflicto, las cuales no fueron nada claras. Hay un sentimiento entre algunos sectores de los obreros que el presidente municipal simplemente se está deslindando del conflicto y con su actitud se posiciona del lado de la patronal.
Su actitud es congruente con sus negocios, ya que es dirigente de un grupo empresarial del ramo de los combustibles, pastelería, salón de eventos, restaurantes y llanteras. Es un personaje ajeno a los sentimientos e intereses del pueblo y dela clase obrera. Además es uno de los políticos reciclados de otros partidos que en años recientes se ha subido al carro del cambio, debido a que los partidos del régimen el PRI y el PAN se han hundido. Esta situación es consecuencia de postular a políticos arribistas sin principios de aquellos partidos que se asumen como izquierda y que desean desde la perspectiva electoral generar algún cambio.
Los próximos días serán decisivos en el movimiento, hacemos un nuevo llamado a las organizaciones sociales, sindicales y estudiantiles a fortalecer la campaña de solidaridad a la lucha de la clase obrera en Matamoros.