Asamblea General de la OCR: ¡Adelante el Partido Comunista Revolucionario!
Mauricio Medina
El pasado 5 de julio se llevó a cabo la Asamblea General de la sección mexicana de la Internacional Comunista Revolucionaria. 140 comunistas de 17 estados del país se reunieron presencial en Ciudad de México y en línea para discutir la necesidad de construir el Partido Comunista Revolucionario frente a las profundas contradicciones del sistema capitalista que han llevado a ataques directos hacia la clase trabajadora mundial, a conflictos imperialistas en Gaza y Medio Oriente, y a mostrar los límites evidentes del reformismo burgués de la 4T en el país. La necesidad de una alternativa revolucionaria es más imperante que nunca.
Así, con la presencia de 90 delegados de los grupos de base de Chihuahua, Ciudad de México, Jalisco, Morelos, Nuevo León, San Luis Potosí, Sonora, Puebla, Baja California Sur, Sinaloa, Chiapas, Querétaro, Quintana Roo, Tabasco y Yucatán se aprobaron los documentos de Perspectivas internacionales: el mundo patas arriba y Por qué necesitamos de un partido Comunista Revolucionario.
Aunque en la Asamblea había veteranos comunistas con larga experiencia en la lucha de clases, es destacable la gran presencia de jóvenes revolucionarios. El ambiente generalizado era de optimismo, de alegría y confianza en el porvenir. Esta asamblea fue la culminación de una discusión que se llevó a cabo en cada uno de los grupos de base. Los compañeros se tomaron muy en serio lo que se ponía a discusión. Varios grupos presentaron enmiendas por escrito para que cada delegado pudiera leer previamente y analizar los cambios para el momento de la votación. Los documentos y las enmiendas se pusieron a discusión en el pleno y fueron votados una a una, algunas de ellas llegarán al Congreso Mundial de Internacional Comunista Revolucionaria. Finalmente se votaron los documentos, en la primera sesión la asamblea mostró su acuerdo fundamental con las perspectivas de nuestra Internacional y, en la segunda, se votó la resolución que se traduce en aceptar impulsar la creación del Partido Comunista Revolucionario.
No es mera retórica cuando decimos que estamos ante la presencia de choques tectónicos importantes. Aunque sigue siendo la potencia más fuerte en el mundo, el imperialismo norteamericano está en un relativo declive, el cual Trump pretende solucionar a través de su cruzada proteccionista. Pero la realidad es que las contradicciones del capitalismo se extienden más allá de Trump y su llegada al poder es el reflejo de una crisis más grande en el desarrollo de las fuerzas productivas y de la bancarrota de la izquierda burguesa para atender los problemas del sistema. El emergente imperialismo chino ha llegado a intensificar las contradicciones de la economía mundial y la lucha actual con EEUU.
Sería incorrecto negar el papel de las masas en este momento de la historia. Han habido levantamientos importantes a nivel mundial, como es el caso de Sri Lanka; las movilizaciones contra el genocidio en Gaza; insurrecciones en Chile, Ecuador, Colombia y una lucha abierta de Panamá contra los ataques y las medidas imperialistas. En México, vimos este año el levantamiento del magisterio contra el programa reformista de la 4T que, al final del día, terminará cediendo en la defensa de la dictadura del gran capital. Poco a poco las masas, y particularmente la juventud, están comprendiendo que no hay salida dentro de la rancia democracia burguesa, la izquierda reformista, ni a través de direcciones sindicales charras que concilian con la patronal a costa de los trabajadores. Como señaló León Trotski en El Programa de Transición, la derrota del proletariado se debe a la crisis en su dirección.
Debemos de confiar en el papel revolucionario de las masas, pero como decía Marx: sin organización, la clase obrera es materia prima para la explotación. Esa es la esencia del Partido: un programa, métodos, ideas y tradiciones en la defensa de la clase obrera y en la lucha franca contra el capitalismo. Un Partido que pueda dirigir la lucha por el comunismo hasta las últimas consecuencias, es decir, hacia un sistema justo que elimine la propiedad privada en los grandes medios de producción y la sociedad de clase, sin conciliar con la burguesía nacional e imperialista.
La lucha contra el capitalismo ha demostrado la necesidad de una dirección revolucionaria clara. En ese sentido, tenemos una misión histórica importante, el compromiso revolucionario será indispensable en las capas de camaradas dispuestos a construir la dirección consciente del proletariado. Con un programa claro y la defensa del socialismo científico que nos heredaron Marx, Engels, Lenin y Trotski para explicar y transformar la realidad, damos pasos importantes en la revolución comunista.
Si estás de acuerdo con nuestras ideas, únete al Partido Comunista Revolucionario para acabar con el capitalismo.
¡Adelante la Internacional Comunista Revolucionaria!
¡Adelante el Partido Comunista Revolucionario!
