La oleada de huelgas de los miembros del sindicato RMT en los ferrocarriles ha envalentonado a todo el movimiento sindical. Desde los carteros y abogados hasta el personal de los aeropuertos: los trabajadores de todas partes están movilizándose hacia la acción y nosotros decimos: ¡Hay que unir las luchas! ¡Abajo los Tories!
Los resultados del primer asalto de la batalla entre el RMT y los empresarios ferroviarios son unánimes. El veredicto es unánime: el sindicato ha registrado una nueva victoria ya que se ha asestado una serie de duros golpes a los conservadores, a los patrones y a sus lacayos en los medios de comunicación.
Los tres días de huelga de la semana pasada fueron contundentes, y los miembros del RMT paralizaron la red ferroviaria. Al mismo tiempo, la solidaridad y el apoyo han llegado de todo el movimiento sindical y de la clase trabajadora en general.
Una encuesta reciente, por ejemplo, reveló que el 62% de los encuestados simpatizaba con los trabajadores ferroviarios en huelga. Y en otra encuesta se observó un número similar de personas que deseaban que el gobierno interviniera para resolver las preocupaciones del sindicato en materia de salarios, puestos de trabajo y seguridad.
También se ha visto un fuerte apoyo público en las líneas de piquetes y en las concentraciones de huelga celebradas en todo el país el sábado 24 de junio (véanse los informes más abajo), con gente acudiendo a apoyar a los trabajadores ferroviarios en su lucha.
‘Ni una sola rueda gira…’
Sin embargo, la lucha está lejos de terminar. El gobierno no ha mostrado ningún deseo de negociar o ceder a las demandas del RMT. Por el contrario, se ha negado intransigentemente a intervenir.
No es de extrañar que los conservadores se hayan protegido con los patrones ferroviarios y lanzado una despiadada campaña de propaganda contra el sindicato, todo ello, por supuesto, con la ayuda de la prensa sensacionalista.
Sin embargo, estos ataques han sido hábilmente evadidos por el secretario general del RMT, Mick Lynch, quien ha contraatacado en defensa de los trabajadores ferroviarios en huelga, revelando así los verdaderos intereses de clase que se esconden detrás de esta disputa.
Al tiempo que respondía a las mentiras y calumnias de los conservadores y de la patronal, el líder del RMT también ha vinculado correctamente la lucha del sindicato con las luchas a las que se enfrentan los trabajadores de otros sectores.
El sábado pasado, por ejemplo, en una manifestación de apoyo a la huelga del RMT frente a la estación de Kings Cross en Londres, Lynch denunció el azote de los bajos salarios y la subcontratación que afecta a los trabajadores en todas partes. Al mismo tiempo, añadió, a costa de esta superexplotación, los empresarios obtienen supergananacias.
Citando al fundador de Socialist Appeal, Ted Grant, Lynch continuó afirmando apasionadamente que:
«Todos vosotros tenéis un poder. Sin nosotros, las ruedas no giran, y las luces no se encienden. Nosotros creamos toda la riqueza de esta sociedad, toda. Es nuestro trabajo el que brinda los servicios, el que fabrica los bienes, los distribuye y los hace llegar a la gente».
Extendiéndose como un fuego salvaje
A su vez, los trabajadores de otros sectores se han visto claramente estimulados por la inspiradora y combativa lucha del RMT. Y como los trabajadores de todos los sectores se enfrentan al mismo ataque a los salarios, los puestos de trabajo y las condiciones laborales, la huelga se extenderá como un fuego salvaje en las próximas semanas y meses.
Al no haber señales de progreso en las negociaciones, se esperan nuevas oleadas de acciones en los ferrocarriles. A los miembros del RMT se les podrían unir sus compañeros de ASLEF y TSSA en futuras huelgas, ya que estos sindicatos ferroviarios también están haciendo votaciones en varias franquicias y en el Network Rail.
Los conductores de Croydon Tramlink, organizados en ASLEF, ya están en huelga tanto hoy como mañana [29 y 30 de junio, NdT]. Por su parte, los conductores de autobús de Arriva en Yorkshire están llevando a cabo una huelga relacionada con un conflicto salarial.
Por otra parte, los miembros del CWU en el sector de las telecomunicaciones y los trabajadores postales del Royal Mail están votando para realizar una huelga. Si se vota positivamente a la acción, los 200.000 trabajadores de la CWU y el RMT harían huelga al mismo tiempo y es probable que les sigan más sindicatos.
Los abogados penalistas de Inglaterra y Gales han iniciado una huelga esta semana, cerrando los juzgados mientras exigen una mayor financiación de la asistencia jurídica. Los funcionarios y los profesores del PCS y del NEU, respectivamente, están convocando una huelga por salarios. Otros trabajadores del sector público -en el sector salud del NHS y la administración local- podrían seguir su ejemplo, cuando se presente la próxima oferta salarial anual del gobierno.
Mientras tanto, cientos de trabajadores del aeropuerto de Heathrow han votado a favor de una huelga durante el periodo de vacaciones de verano, la cual será en protesta por los ataques de los patrones de las aerolíneas.
Esta creciente marea de combatividad demuestra por qué los Tories se niegan a contemporizar con el RMT. El gobierno teme que el éxito de las protestas, y que la victoria de los huelguistas ferroviarios incite a otros trabajadores a exigir más. Por eso están tan interesados en romper esta huelga, y dar un ejemplo al sindicato.
¿De qué lado estás?
La dirección del Partido Laborista se ha opuesto escandalosamente a estas huelgas y a las convocatorias de lucha. Su dirigente, Keir Starmer, y el secretario de Asuntos Exteriores, David Lammy, el cual actúa como la sombra de Starmer, han denunciado públicamente a los sindicatos y se han puesto del lado de los patrones.
Pero con una inflación que sigue disparándose y que incluso alcanzará el 11% en octubre, los trabajadores no tienen más remedio que organizarse y luchar.
En contraste con la directiva del Partido Laborista, los activistas de Socialist Appeal han ofrecido a los huelguistas del RMT todo su apoyo y solidaridad, en los piquetes y protestas, y en las recientes concentraciones. Nos movilizaremos para apoyar a todos los trabajadores en la lucha contra los conservadores y los empresarios.
Como los líderes del RMT han declarado correctamente: esto es una guerra de clases. Sabemos de qué lado estamos. Unidos y organizados, armados con políticas socialistas claras, es nuestra clase la que ganará.
- ¡Solidaridad con el RMT!
- Apoyemos una acción masiva coordinada para derribar a los Tories.
- ¡Victoria para los trabajadores!